Los trabajadores de Sniace aceptan el acuerdo, incluidos los 57 prejubilables

En cuanto a los trabajadores convocados por USO, que se opone al acuerdo, el 85% de los mismos rechazó lo pactado en la asamblea celebrada también ayer.

El secretario del comité de empresa, Antonio Pérez Portilla, destacó el esfuerzo que se ha realizado para cerrar el acuerdo con la empresa que supone el paso previo para llevar al Tribunal Supremo el nuevo plan laboral antes de que se dicte la sentencia que podría ser en torno al 1 de julio.

El acuerdo contempla 240 despidos y 57 jubilaciones con contrato de relevo y subsidios para los trabajadores de Viscocel de 575 euros y celulosa de 400 euros, así como el pago de la antigüedad mediante una cantidad fija, que será a final de año en 2016 y 2017 y mensual a partir de 2018, entre otras cuestiones. Pérez Portilla explicó ayer que los sindicatos han conseguido elevar de 42 a 57 los trabajadores mayores de 57 años que verán revertidos sus despidos.

Una cuestión que ha suscitado la polémica es el futuro salario, puesto que el ERE no se convertirá en ERTE con lo que no hay un salario social como tal. En este sentido, se llegó al acuerdo de que los contratos temporales, de reducción de jornada, serán fijos y se decidió un salario de 400 euros para los trabajadores de celulosa y otro de 575 euros para los de Viscocel, que tardarán más tiempo en reincorporarse (unos nueve meses). El secretario del comité indicó que la cotización a Hacienda de la indemnización por despido ocasionó «bastantes problemas» en la negociación puesto que el plazo de tres años para no declarar por ella se cumple el 23 de septiembre, de modo que «por 23 días van a tener que pagar» y es «un buen palo». Ese es el motivo de que «a muchos trabajadores contratados en un primer momento no les interese hacer el contrato ya», explico en referencia a los de celulosa, que serían los primeros en incorporarse a trabajar.

De otro lado, hay trabajadores, sobre todo mayores, a los que puede interesar más percibir el subsidio por desempleo hasta el 23 de septiembre porque la cotización a la Seguridad Social es mayor «que si te contratan por una hora». «Aunque cobres los 400 euros mensuales, pueden estar cotizando por 70 euros», dijo. «El que quiera cobrar los 400 euros, lo podrá hacer. Pero hay que pensar si merece la pena cobrar 400 euros y dejar el subsidio cuando la cotización a la Seguridad Social va a ser inferior», destacó.

En relación a la antigüedad, Pérez Portilla explicó que su pago «no está sujeto a condiciones» y se abonará una cantidad fija en diciembre (correspondiente a unos dos meses) y otra a final de 2017, que será mayor que la de este año, mientras que a partir de 2018 el pago será mensual en un plus aún por determinar.

El representante del comité insistió en que el pago de la antigüedad «no está sujeto a ninguna variable ni a que el acuerdo vaya bien, sino que es una cantidad fija, la que nos correspondía por antigüedad».

En cuanto al pago por parte del Fogasa de las indemnizaciones por despido, Pérez Portilla explicó que los trabajadores que opten a ser readmitidos no solo podrán cobrar su indemnización del Fogasa sino de la empresa, reclamando para ello a los administradores concursales. «El Fogasa de Madrid tiene un funcionamiento diferente, pero la empresa tendrá que pagar», señaló Pérez Portilla.

Valoraciones

Ayer mismo las primeras valoraciones de la buena noticia no se hicieron esperar. La vicepresidenta regional, Eva Díaz Tezanos destacó que el Gobierno regional ha estado «apoyando, colaborando y ayudando» en todo lo que estaba en su mano «desde el primer día». «Nosotros no hemos puesto palos en las ruedas, como hizo el Gobierno del PP», dijo.

El secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, celebró el preacuerdo tras un proceso de negociación que ha calificado de «muy duro y difícil». En declaraciones a los periodistas, Toxo expreso su deseo de que este preacuerdo sirva para recuperar la actividad de la fábrica de Torrelavega.

De otro lado, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, mostró su «satisfacción» por el acuerdo laboral alcanzado en la compañía Sniace, «el mejor posible», ya que permite dar «continuidad» a la empresa tras superar el concurso de acreedores. El sindicalista celebró el acuerdo, respaldado de manera «prácticamente unánime» por la plantilla, y ha felicitado a los trabajadores y al sindicato en Cantabria por el trabajo realizado durante casi tres años.