Secciones
Servicios
Destacamos
De noche, como viene siendo tradición en los procesos electorales en que está inmersa la patronal autonómica, CEOE-Cepyme confirmó la identidad del que será su nuevo presidente, ése que toma el relevo de Lorenzo Vidal de la Peña después de que éste decidiera ... abandonar el altavoz que le otorgaba su puesto al frente de la confederación para encaramarse a la tribuna del Parlamento de Cantabria como número dos de la lista del PP que encabeza María José Sáenz de Buruaga. Enrique Conde ganó ayer los comicios a Emérito Astuy tras imponerse por 578 votos a 471, con cuatro papeletas en blanco.
Las elecciones contaron con una participación del 68% de los socios, lo que supone un 76% de los votos, informó la entidad en un comunicado de prensa.
«Estoy muy satisfecho. De verdad creemos que era la apuesta más clara para la CEOE-Cepyme», arrancó el ganador. «Siempre he dicho lo mismo. El trabajo que se ha hecho estos años ha sido muy duro. CEOE estaba como estaba. Todos los empresarios agradecemos la labor que ha hecho Lorenzo (Vidal de la Peña), pero el paso que ha dado hacia la política ha propiciado estas elecciones», manifestó.
En su primera declaración tras conocer el resultado, Conde fue más allá. «Entendíamos que iba a ser una candidatura de consenso, aunque al final ha sido imposible. Yo por lo que conozco de la historia de la confederación, de cómo fueron otras elecciones y el planteamiento que hubo de conflicto, pienso que en esta ocasión no ha pasado, aunque siempre se escapa alguna cosa por ambas candidaturas. Por ello, y por el resultado, creo que hay que estar contentos», concluyó.
Por su parte, Astuy quiso «felicitar a Enrique y desearle mucha suerte para que cuide de la casa de todos los empresarios. Nosotros hemos presentado nuestro proyecto y los socios han hablado», subrayó.
El veredicto venía a poner fin a una larga y tranquila jornada de votaciones que sobre las nueve de la noche derivó en el recuento. Los miembros de la Junta Electoral y los interventores de ambas candidaturas se encerraron a cal y canto, dejando los móviles fuera de la estancia, para dar comienzo al escrutinio. Una tregua que los equipos de ambos aspirantes aprovecharon para salir a tomar aire después de pasar buena parte de la tarde en diferentes plantas de la sede que la entidad tiene en la Calle Tres de Noviembre de Santander. Astuy, arropado, entre otros, por el presidente de la Asociación de Hostelería, Ángel Cuevas; el expresidente de la Cámara de Torrelavega, Antonio Fernández Rincón; o el que igualmente fuera mandamás de la patronal Miguel Mirones. Conde, por su parte, respaldado por la presidenta de la Asociación de Jóvenes Empresarios, Gema Coria; Norberto Ortiz, de la Confederación Española de Autónomos; o Martín Silván, encargado del área de Medio Ambiente en la organización.
Hasta ese momento la expectación era la nota reinante y nadie se atrevía a hacer un pronóstico certero. Conde y Astuy aguardaban impacientes noticias del conteo, que como aperitivo promovió una filtración que daba al ingeniero de Caminos una ligera ventaja en las delegaciones de voto de 30 apoyos más.
Finalmente, poco antes de las 22.30 horas, la notificación final por parte de los miembros de la Junta Electoral. A partir de ahí, sonrisas, abrazos y alguna que otra lágrima para cerrar el proceso electoral y abrir una nueva etapa en la confederación que contará con un carácter continuista en principio.
El ganador tiene ahora una compleja misión, al menos un cometido inesperado hace apenas unas semanas. En primer lugar, volver a unir a una organización que había pacificado sus trifulcas internas en los último años y donde el sobrevenido proceso electoral ha contribuido a abrir heridas pasadas. Al menos a devolver cierta división a una confederación que no contaba inicialmente con que la renovación de presidente se acometiera necesariamente en las urnas.
Porque el primer escenario manejado por el grueso del tejido corporativo autonómico era el de buscar una candidatura integradora y de consenso que satisficiera a las sensibilidades que pudieran surgir en esta coyuntura. Siempre mirando, eso sí, hacia el Cantabria 2030, el plan estratégico que promueve la patronal, y hacia una independencia que ha salido a relucir tras el salto de Vidal de la Peña, Joaquín Fernández Berjano y Marta Fernández Teijeiro hacia las listas del PP en las próximas elecciones autonómicas y municipales. Tres trasvases directos de la Ejecutiva empresarial a la sede de Joaquín Costa que incluso podrían haber sido más si no fuera por cambios en las listas de última hora. En ese contexto fue Conde el que se lanzó a proclamarse como esa figura que convenciera a todos, aunque rápidamente surgió Astuy para encabezar la corriente descontenta con el rumbo de la organización en los últimos tiempos.
Una distancia proclamada frente al Gobierno de Cantabria, y las siglas que tienen asegurada presencia en el antiguo Hospital San Rafael en la próxima legislatura, que no ha sido óbice para que destacados miembros de varias formaciones, tanto de dentro como de fuera del Gabinete actual, hayan descolgado el teléfono en los últimos días para pedir el voto para los candidatos. Al fin y al cabo, la patronal es un poderoso agente social que en los últimos tiempos de Vidal de la Peña había subido varios grados la intensidad en su discurso contra la coalición PRC-PSOE, de ahí que su paso a la primera línea política haya levantado no sólo suspicacias, sino incluso ampollas en algunas compañías.
Como muestra, varias de las principales empleadoras de la Comunidad dejaron claro a los aspirantes la necesidad de independencia de CEOE respecto a otros poderes y estamentos, un lenguaje que caló en ambas propuestas. En la de Astuy, por motivos evidentes al ser la iniciativa reaccionaria a la «politización» de la entidad que ha denunciado durante la campaña; e incluso en la de Conde, que además de defender su autonomía respecto a Vidal de la Peña, también ha reconocido en público y en privado la necesidad de mantener una relación neutral con Peña Herbosa que no esté exenta de carácter reivindicativo cuando toque alzar la voz.
Conde, de 47 años de edad y natural de Camargo, está al frente de la firma tecnológica Soningeo. Cuenta además con empresas de los sectores inmobiliarios y de construcción en Latinoamérica, con una plantilla en torno a las 100 personas.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.