Las fallidas elecciones en la Cámara de Comercio alejan aún más a los dos grupos empresariales

Aunque los dos bloques insisten en que lo peor es «la imagen» que están trasladando los empresarios de la región y «el daño» que se está generando «a la Cámara» y «a toda Cantabria», la distancia que los separa es abismal. Cornadó presentó un recuerso que debe ahora dirimir los servicios jurídicos del Gobierno, ya que entiende que su candidatura es legítima pese a la salida de Hostería de su lista. «La decisión ha sido tomada con premeditación. La candidatura estaba consensuada y hablada. Yo me entero por el secretario de la Cámara de que no siente representado -en alusión a Javier Bedia, presidente de los hosteleros-. No me llamó para hablarlo y comentármelo personalmente. Tendrá sus motivos y sus razones, pero lo que hace es enturbiar y alterar el proceso», censuró Cornadó.

Por su parte, Javier Bedia aprovechó una comparecencia pública para ofrecer su versión. «Fue una decisión que hemos tomado la Asociación de forma conjunta y hemos esperado hasta última hora pensando que al final se iba a conseguir una candidatura de consenso, que es por lo que abogamos nosotros como empresarios», dijo. «La disputa entre todos no conduce a nada», recalcó antes de hacer una llamada al entendimiento. «Lo que habrá que hacer, será sentarnos tranquilamente y diseñar una candidatura en la que cada uno se sienta a gusto y nos sintamos representados. Quizás no ha sido la forma o los tiempos, pero haber si entre todos ponemos un poco de cordura. Nosotros, como colectivo, vamos a ser siempre neutrales», concluyó.

La lista de Manuel Huerta fue la única de las dos que se pudo votar, pero fue rechazada por el Pleno por 27 votos en contra, 10 a favor y cuatro abstenciones. Él mismo explicó de manera gráfica el motivo de su paso adelante. «Un grupo de empresarios vimos, desde que todo empezó, que un tren venía a toda velocidad en sentido contrario y nos tiramos a la vía para intentar pararlo», afirmó a este periódico. «Creemos que la propuesta que había no era la más correcta, por eso estuvimos abiertos a hablar hasta el último momento. Cuando nos dimos cuenta de que no teníamos ninguna otra manera de convencer a la otra parte, decidimos dar un paso adelante y presentarnos en su contra», añadió. «Hemos trabajado siempre con trasparencia, mi línea de comunicación ha estado siempre abierta con Enrique Conde -el presidente de la CEOE que impulsa la candidatura de Cornadó-», subrayó.

Por último, Huerta dejó claro su intención -y la del grupo de empresarios que representa- a partir de ahora: «Mi objetivo es que se convoquen nuevas elecciones al Pleno para tener uno que represente al comercio, la industria y la navegación».

El Ejecutivo en funciones debe tomar las riendas de la situación. Lo primero que deberá hacer es pronunciarse sobre el recurso interpuesto por la candidatura de Cornadó. Luego, si tumba la reclamación, debería convocar elecciones otra vez.

La Dirección General de Comercio no desveló ayer los tiempos que se manejan a partir de ahora, aunque las dos partes implicadas creen que podría tratarse de meses. El próximo Gobierno tendrá que ser , por tanto, el que despeje la ecuación. Mientras tanto, el actual en funciones deberá tutelar durante todo este tiempo a la Cámara para que pueda seguir funcionando con normalidad.