Garicano: «Cantabria podría ofrecer la marca 'destino seguro' para salvar el turismo»

Garicano aconsejó que Cantabria debe aprovechar su ventaja para 'vender' un turismo seguro. Para ello, la idea sería la marca 'destino seguro' en la que se ofrecieran las playas y los establecimientos hosteleros como espacios seguros para los visitantes y poder salvar la temporada y al sector en su conjunto. Gran defensor de Cantabria (visitante habitual de Loredo), señaló que la región tiene que trabajar en hacerse «más atractiva» para que todo el mundo quiera venir, traer empresas y «quedarse a vivir». Reconoció el nivel alto de la Educación en la región, pero insistió en que la apuesta formativa, con dominio del inglés es fundamental.

Sin embargo, para el eurodiputado el Gobierno regional no ha hecho lo suficiente para unirse al corredor del Atlántico, aunque ahora con los recursos que vengan de la UE es un buen momento para la mejora de las infraestructuras. «Es una oportunidad enorme la que puede tener la región con el plan europeo de reconstrucción, similar a lo que supusieron los fondos Feder en los años 90», dijo Garicano y apuntó el tema de las infraestructuras 'limpias' como las ferroviarias.

El economista afirmó que de esta crisis sanitaria lo ideal sería salir «de una manera limpia» «como después de una guerra» y no debemos perder de vista que los últimos datos, con solo un 5% de la población contagiada, tenemos que tener presente que el virus está aquí y que es mucho lo que queda por recorrer, si bien «la situación no es tan mala como durante el encierro» y se va a tener que aprender a convivir y aunque la economía funcione bajo los efectos del virus por lo que es necesaria la precaución.

El eurodiputado estimó que en España se ha pecado de improvisación, si bien el encierro ha dados sus frutos, pero ahora es el momento de tener un plan, en especial para sectores tan importantes como el del turismo, del que depende el 15% del PIB nacional. «Somos de los pocos países que no tenemos un plan», valoró Garicano que cree que hay que hacer todo lo posible para que este año la temporada turística «no sea una catástrofe».

El dirigente de Ciudadanos se refirió a la postura de su partido durante la pandemia y señaló que «hemos hecho un esfuerzo negociando con el Gobierno para que la empresas no se vean perjudicadas y el empleo y se mantengan los ERTE en sectores como el turístico para que no se tengan que incorporar todos los afectados de golpe porque conseguir funcionar con una ocupación baja es todo un reto».

Garicano se mostró en todo momento contrario a los populismos. También criticó las posturas que han manifestado ministros como el de Consumo, Alberto Garzón, y la de Trabajo, Yolanda Díaz que, en su opinión, han dejado claro que «piensan que todos los empresarios solo quieren robar y explotar a los trabajadores» cuando lo que ahora se necesitan son apoyos «para que todo se ponga en marcha de la mejor manera posible».

En relación a la recesión económica que nos traído el coronavirus, el eurodiputado señaló el impacto especial en nuestro país, entre otras cosas por la importancia del turismo. «Va a ser una situación en la que España va a tener que trabajar mucho y muy fuerte». Por ello, reiteró el esfuerzo que está haciendo Cs «de tender la mano» para «remar en la misma dirección».

De otro lado, Garicano afirmó que en estos momentos «no está sobre la mesa el rescate» porque se estima que no es un mecanismo que se deba utilizar sino que la vías más correctas es «la mutualización de las nuevas inversiones».

Sobre la postura de la sociedad española ante la crisis, el economista defendió la sensatez. Cree que es el momento para poner en valor todo lo que se ha hecho porque si no el confinamiento y los sacrificios no habrán servido para nada. En este sentido, consideró que la sociedad española se ha comportado de forma «espectacular», con «madurez» y coherencia.

En relación al cambio de modelo que va a traer la actual crisis sanitaria, Garicano reconoció que lo que se venía planteando en décadas, por ejemplo el teletrabajo, se ha logrado en tiempo récord. Se han mantenido reuniones a distancia e incluso clases (él mismo ha dado alguna en la Universidad de Chicago, con la que colabora) y se ha hecho todo de un día para otro. En este sentido, piensa que el objetivo para los próximos meses será asegurar la salud y que los sanitarios puedan trabajar en las mejores condiciones .

Garicano se refirió a las lecciones de la crisis. La primera, la importancia de la salud, familia y amigos; la segunda, las oportunidades que abre el teletrabajo y, por supuesto, el buen comportamiento que han tenido los españoles. «Estoy orgulloso de mi país», concluyó.

Garicano respondió a una pregunta sobre la necesidad de contar en estos momentos con la aportación de expertos como los economistas. «Cuando van bien las cosas no pasa nada, pero cuando van mal o regular es el momento para contar con los especialistas, como los economistas, para entender lo que nos pasa», dijo y añadió que le gustaría «aportar valor en estos momentos» para acertar con las mejores soluciones.

En relación a una pregunta sobre la fiscalidad en España, el eurodiputado indicó que habría que modificar la estructura porque se tienen «unos tipos impositivos altos, pero la recaudación es baja» y los impuestos tienen «muchos agujeros». Puso como ejemplo lo poco que pagan las empresas tecnológicas en España, caso de Netflix que ingresa solo 3.000 euros por el Impuesto de Sociedades» por utilizar los trucos de la ingeniería financiera.

Luis Garicano se mostró comprensivo con la postura que mantienen los países del Norte de Europa frente a los del Sur. «Ellos han hecho sus deberes y no quieren endeudarse por los que no los hemos hecho» y explicó que los países del Norte se preguntan por qué van a tener que pagar por un sistema público sobredimensionado o por unas pensiones como las que tenemos en España. «Hay que entender su postura», dijo.

Utilizando un símil marinero, Garicano estimó que «para hacer frente a la tormenta se necesita un experto en navegación» y que es necesario que triunfen las posturas populistas que insisten en que todo está mal y no hay salida o bien en plantear soluciones que no son las que se necesitan. Entre las posturas deben triunfar la que apueste por los expertos y ayude al Gobierno a tomar las mejores decisiones. «Espero que no triunfe el populismo», afirmó.

La anterior crisis económica ya produjo cambios en lo que a la clase media se refiere, en especial a la media-alta. Para Garicano, ahora la posibilidad de que unas personas puedan teletrabajar y otros no puede marcar una diferencia. «Los cambios se han acelerado con la crisis», dijo y se refirió a la posibilidad, que la preocupa, de que se creen «desigualdades» al disponer o no de las herramientas que ofrece el sector de la tecnología.

El eurodiputado señaló que entiende que se tenga que contar con una renta social mínima en estos momentos, pero todo lo que se apruebe debería encaminado «a buscar empleo». En su opinión, lo más importante es la formación para que los que están ahora en paro puedan acceder a nuevos puestos de trabajo. Indicó que en muchas ocasiones las empresas no encuentran los perfiles que buscan por falta de la formación adecuada.