La gasolinera de EasyGas de Parayas cierra por falta de combustible

En la otra estación de servicio de la misma marca, en Ontón (Castro Urdiales), la situación no era mucho mejor a última hora de la mañana. «Gasolina ya no tenemos desde el domingo y estamos abiertos con lo que nos queda de gasóil. Apurando. Pero igual no llegamos a las siete de la tarde». Allí aseguraban igualmente que dependían del camión, «de saber si le dejan pasar o no». La falta de suministros se ha cebado con estos dos negocios. Pero desde la asociación que aglutina al 80% de las gasolineras de Cantabria insisten en que ellos no tienen problemas y que el suministro «está garantizado».

La situación de los dos puestos de EasyGas en Cantabria se repitió también en sus establecimientos en Vizcaya. Pero igualmente, sólo a ellos. El responsable de la cadena, Joseba Barrenengoa, aseguraba que se habían visto «muy afectados» porque los transportistas con los que trabajan en el norte –no en el resto del país– «son autónomos». «Muchos no están trabajando por miedo a que les dañen el vehículo y otros secundan los paros».

Desde la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de Cantabria, no obstante, se desmarcaban de esta situación (EasyGas no forma parte). Este colectivo aglutina 85 negocios (el 80% de los que hay en la región) y no tenían incidencias de consideración. «Lo único que me han transmitido es un caso que les faltó el sábado durante media hora. Nada más. Las estaciones de servicio de la asociación han sido previsoras y no tienen ningún problema de suministro. No hay desabastecimiento ni falta de producto. El suministro está garantizado», insistía Jorge de Benito, que es, de hecho, presidente de la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio.

Por otro lado, la subida en los precios de las últimas semanas parece haberse estancado y ha habido ligeras bajadas. Este lunes, en Nueva Montaña (por ejemplo), el diésel estaba a 1,779 y la gasolina, a 1.799 (estuvieron cerca de los dos euros).