El Grupo HTG, dueño de Ambuibérica, sale a la venta por cerca de 250 millones

La operación no tiene un calendario establecido, en el sentido de que no está estructurada como una subasta competitiva al uso, señaló días atrás El Economista. No obstante, la transacción se pretende cerrar en los próximos meses al calor de la predisposición mostrada por otros inversores industriales.

HTG nació en el año 2017, fruto de la fusión de la vallisoletana Ambuibérica y la catalana Emeru. En la actualidad, cuenta con unas ventas superiores a los 300 millones, 7.500 trabajadores y una flota de más de 3.000 vehículos. Además, es el operador de transporte sanitario líder de España y segundo del continente. En Cantabria, según fuentes sindicales, la empresa cuenta con unos 450 empleados.

La evolución en los últimos años en la corporación no puede entenderse tampoco sin la presencia de estos fondos. ProA Capital entró en el accionariado de Ambuibérica en mayo de 2011 y fue su tercera inversión. La firma liderada por Fernando Ortiz se encarga de la gestión después que el pasado septiembre traspasara la compañía y otras dos participadas antiguas, Rotor e Ibermática, a un vehículo secundario propiedad del fondo británico Glendower. Por su parte, Investindustrial entró en el accionariado de Emeru en 2010 e impulsó su crecimiento mediante la integración de diferentes marcas del sector. El fondo propiedad de la familia Bonomi intentó vender su participación en la por entonces conocida como Transport Sanitari de Catalunya (TSC), pero la inestabilidad política complicó el proceso, explicaba igualmente El Economista.

La corporación es el actor dominante en el sector privado de ambulancias en España. HTG opera en Galicia, Cantabria, Castilla y León, Aragón, Cataluña, Baleares, Andalucía, Madrid y Canarias.

En Cantabria aterrizó en 2012 tras hacerse con el contrato de transporte sanitario, que consiguió renovar en 2017. Esta última adjudicación salió a licitación con un presupuesto de 48 millones, un montante un 33,7% superior al del contrato anterior (35,9 millones).

La pasada semana la corporación emitió un comunicado interno para sus trabajadores en el que trataba de replicar a las informaciones que situaban al grupo en situación de concurso de acreedores, algo que HTG negó de plano, tanto para la matriz como para algunas de sus sociedades.

Lo que sí señalaba la corporación era el auto de refinanciación dictado por el Juzgado de lo Mercantil nº 2 de Barcelona el 2 de octubre de 2020, un acuerdo con un sindicado bancario rubricado en junio.

Más allá de las tribulaciones financieras, la polémica sí que ha venido acompañando a Ambuibérica en sus relaciones laborales en Cantabria. El último episodio, de los más sonados, la denuncia el pasado mes por parte del comité de empresa al considerar que se estaba realizando, por parte de la Dirección de la compañía, un mal uso de las vacunas que les proporcionó el Servicio Cántabro de Salud (SCS). En su opinión, lo más grave no era que alrededor de 200 técnicos de las ambulancias -casi la mitad de la plantilla- no hubiera recibido aún el pinchazo, sino que Ambuibérica, tal y como se recogía en el escrito judicial, priorizó al gerente de la empresa en Cantabria y a las áreas de oficina y administración, frente a los trabajadores que se encuentran en primera línea.