La huelga que arranca el lunes en Renfe dejará a Cantabria sin dos Alvia con Madrid y sin la mitad de los Cercanías

Estas son las primeras afecciones que sufrirán los viajeros de tren de la región el primer día de la huelga general que los comités de empresa han convocado en Renfe y Adif. Las jornadas de paro serán siete, pero no serán seguidas. La primera semana, los trabajadores podrán parar lunes y miércoles, al igual que la siguiente, en la que también se parará el viernes. Las fechas de huelga son todas estas: 17, 19, 24, 26 y 28 de marzo y el 1 y 3 de abril y están llamadas a secundarla las dos plantillas (suman unos 700 trabajadores en la Comunidad). Según confirmaron fuentes sindicales, los trenes que circularán y los que no lo harán serán los mismos en todas las jornadas de paro.

Los convocantes en la región han denunciado que la movilización se iniciará «con unos servicios mínimos abusivos», que han sido decretados por las dos compañías estatales «sin acuerdo con los comités de huelga». Los portavoces del personal han citado a los trabajadores en la plaza de las Estaciones de Santander a una concentración en el primer día de la huelga. Será a las 11.00 horas.

Los dirigentes sindicales quieren entorpecer o paralizar la circulación ferroviaria en toda España en protesta por un acuerdo que el Ministerio de Transporte ha incumplido para Renfe Mercancías y para las Cercanías de Barcelona. Según han explicado, el Ministerio se había comprometido a que Renfe y Adif continuarían como prestadores del servicio de Rodalies (Cercanías de Barcelona) y de Renfe Mercancías, a mantener íntegramente las plantillas de las dos compañías ferroviarias públicas y a crear un grupo de trabajo y de negociación para soluciones consensuadas.

Pero las organizaciones consideran que estos compromisos se vulneraron el 17 de febrero cuando el Ministerio anunció que se excluía la línea R-1 de Rodalies de la Red Ferroviaria de Interés General para ser traspasada a la Generalitat de Cataluña. Rechazan, por otro lado, la creación de «una empresa mixta ajena a Renfe y Adif para asumir progresivamente todas las actividades operativas de ambas compañías», algo que, en opinión de los representantes de la plantilla suena a «privatización encubierta de Renfe Mercancías a través de una sociedad controlada por la compañía logística MSC».

En todas las decisiones anunciadas los sindicalistas intuyen pasos hacia el deterioro de las empresas públicas, ya que las privan «de concurrir a contrataciones, obstaculizan la labor de los comerciales para captar clientes y bloquean la operatividad de los trenes por la inacción de los centros de gestión». Según los comités de empresa de Renfe (UGT, Semaf, CCOO, CGT y Sindicato Ferroviario) y de Adif (CCOO, UGT y CGT) en Cantabria, los siete días de huelga convocados afectarán a una plantilla de unos 28.000 empleados en toda España.