La huelga de los inspectores de pesca amenaza la vigilancia de la costera del bocarte

Según explica a El Diario la Asociación Profesional de Inspectores de Pesca (Apipes), en Cantabria actualmente hay cinco efectivos encargados de vigilar la actividad. Estos inspectores están integrados en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), que en todo el país cuenta con una plantilla de cerca de 170 profesionales.

Apipes advierte de que su huelga es a largo plazo, por lo que el seguimiento en Cantabria durante las jornadas iniciales fue del 80%, frente a un 90% del conjunto nacional. «En esos primeros días buscábamos mostrar la unión de los inspectores en este conflicto. Somos conscientes de que la huelga durará mucho tiempo, por lo que después de los días iniciales hemos decidido dosificar nuestros esfuerzos y centrarnos en las campañas de mayor impacto», señala la Asociación respecto al comienzo de las movilizaciones hace dos semanas.

Unas protestas que ya han impactado en la actividad. Según Apipes, la huelga derivó en un descenso de inspecciones en todo el país de un 67%; mientras que las presuntas infracciones igualmente bajaron un 40%. El colectivo no desglosa a nivel regional, pero sostiene que Cantabria tiene unos parámetros similares.

Los inspectores recuerdan que «la costera del bocarte es una campaña muy importante para la flota de cerco cántabra. Al ser una campaña muy importante, sí centraremos nuestros esfuerzos en ella y realizaremos huelga de forma masiva en esas zonas. Desde la Subdirección General de Vigilancia Pesquera y Lucha contra la Pesca Ilegal intentarán paliar la huelga de los inspectores de País Vasco, Cantabría y Asturias (principales zonas donde venden los cerqueros) por medio de los servicios mínimos, pero los efectivos será insuficientes para controlar las descargas de todos los puertos», avisan.

Las movilizaciones van encaminadas a mejorar las condiciones laborales del colectivo, de modo que los inspectores ponen en valor su trabajo de cara a semanas venideras. «Para la flota es muy importante tanto el control del tamaño del bocarte –si es de tamaño pequeño no tiene buen precio y se consume cuota con un precio bajo en lonja– como la cantidad capturada, dado que existen unos topes y si se vende más por fuera de lonja, en negro, baja el precio del producto legal».

Apipes recuerda que el año pasado se detectaron al principio de la campaña capturas por debajo de la talla mínima permitida por parte de «una parte muy pequeña del sector. Aunque la mayoría de la flota cumple las normas, estas acciones de muy pocos perjudican a la mayoría».

La huelga, apoyada por los sindicatos CC OO y ELA, no sólo afectará a la campaña del bocarte, sino que coincidirá con la de la caballa. «A pesar de ser abusivos, los servicios mínimos serán claramente insuficientes para cubrir ambas», sostienen los inspectores, que sí protagonizarán protestas en las lonjas cántabras cuando el bocarte se descargue masivamente en la región.