Institución de la fe católica
Obispado de Santander -268 años ·
Su creación en 1754 contribuyó a organizar la fe de las denominadas Montañas de Burgos y a fortalecer la personalidad del territorio y la capitalidad santanderina.Secciones
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Obispado de Santander -268 años ·
Su creación en 1754 contribuyó a organizar la fe de las denominadas Montañas de Burgos y a fortalecer la personalidad del territorio y la capitalidad santanderina.Enredando en su página web https://www.diocesisdesantander.com/ puede resultar curioso el contraste entre la actualidad y el pasado de la institución, entre las antiguas leyendas en torno al origen devocional de sus patronos, por ejemplo, y la actualidad cuajada de complejidades y estímulos ... comunicativos. A través de la web puede el lector interesado conocer la realidad más inmediata del Obispado de Santander, los órganos diocesanos, la actividad del obispo, la vida pastoral, las distintas delegaciones, la guía y la agenda diocesanas y un apartado sobre prensa, además de tweets y otras notas. No olvida el obispado la deseable transparencia y apertura informativas, con la publicación, entre otras cosas, de las memorias económicas de cada uno de los últimos ejercicios fiscales. Quiero destacar que la web es reflejo de una voluntad de claridad y transparencia que siempre se agradecen y que en este caso debieran copiar otras entidades, públicas o incluso privadas, en el desarrollo de las funciones para las que estén llamadas. Dice en su texto introductorio el obispado que «la Conferencia Episcopal Española se compromete, de acuerdo con la normativa vigente y con arreglo a las limitaciones derivadas de la misma, a llevar a cabo actuaciones dirigidas a aumentar el nivel de transparencia y apertura informativa de la propia Conferencia y de los órganos e instituciones dependientes de la misma, entre las que se encuentra la diócesis de Santander». Si esto no se ha hecho antes, es de lamentar, pero en todo caso bueno es que se haga y que instituciones como el obispado se actualicen en lo posible y den a conocer su quehacer. La historia eclesial se manifiesta también a través del mantenimiento de cargos y términos históricos, como vicaría, curia y cancillería.
En 1754 se creó el obispado de Santander pero la historia de su erección se inicia en el siglo XVI. El territorio jurisdiccional del actual obispado ha pertenecido a lo largo de los siglos al arzobispado de Burgos y los obispados de León, Palencia y Oviedo. La posibilidad de que Las Montañas de Burgos se disgregaran de estas entidades, aunque estuviera justificada por la distancia a la capital de las mismas y fuese apoyada por los sucesivos monarcas desde Felipe II, creaba controversias en el cabildo burgalés, entre otros. Fue durante el reinado de Fernando VI cuando se dieron las circunstancias propicias para la creación del obispado. Coincidió que el confesor del rey era el Padre Rábago, de origen purriego, en concreto de Tresabuela (donde su casa creo que está abandonada, se ve que como premio a su labor); el jesuita animó el viejo empeño, ayudándole a su manera el empresario Juan de Isla, íntimo del marqués de la Ensenada, el político Miguel de la Gándara y el embajador en Roma, Portocarrero. El Papa Benedicto XIV, tras un nuevo concordato, firmó el 12 de diciembre de 1754 la bula 'Romanus Pontifex' por la que la entonces villa de Santander se erigía en sede episcopal, siendo su primer obispo, de hecho, su abad, Francisco Javier de Arriaza. La abadía o colegiata de los Santos Emeterio y Celedonio, iniciada en 1217, se convertía en catedral y automáticamente la villa en ciudad, aunque el decreto regio se retrasara hasta el 15 de enero de 1755. Santander pasaba a ser la capital espiritual y administrativa de todo el territorio diocesano, a pesar de la importancia histórica que tenían o habían tenido otras villas. El territorio original abarcaba Peñamellera, Rivadedeva y Encartaciones y no incluía Campoo. Entre otras cuestiones reseñables en su historia, el obispado fue una de las entidades que alentó la primera imprenta provincial, la de Riesgo, que no llegó hasta 1792.
Incluyendo al actual obispo, Manuel Sánchez Monge, ha habido veinte en la diócesis; los que más tiempo han ocupado la silla episcopal han sido Sánchez de Castro (36 años), Menéndez de Luarca (35) y Eguino Trecu (32).
El Obispado, por si el dato puede resultar curioso, mantiene el topónimo de la capital cántabra, porque los obispados son así, se denominan según sea la sede episcopal, no atienden a demandas autonómicas aunque en ocasiones leamos sandeces como 'Iglesia vasca' o 'Iglesia catalana', que son expresiones contradictorias en sí mismas.
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