Secciones
Servicios
Destacamos
«La mayor inversión de la historia de Cantabria». La primera vez que se pronunció esa frase en relación al proyecto de ampliación de la central hidroeléctrica de Aguayo fue el 9 de marzo de 2011, durante la presentación del plan por parte de ... la entonces propietaria de la infraestructura, la corporación energética E.ON. Han transcurrido casi diez años desde aquel anuncio que no se llevó a la práctica por diferentes motivos -normativa, crisis económica, cambios de propiedad de los activos...- hasta que ayer volvió a repetirse en su literalidad. Esta vez ha sido Repsol quien, en la documentación enviada a primera hora de la mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para desgranar su Plan Estratégico 2021-2025, incluía la propuesta cántabra entre sus inversiones en materia de renovables en España, con un desembolso de 700 millones para lograr una capacidad de almacenamiento de 1.000 megavatios.
De hecho, el documento recoge que «la opción de ampliación» podrá ponerse en marcha entre 2022 y 2023, prácticamente los plazos que le trasladó el consejero delegado del gigante petrolero, Josu Jon Imaz, al presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, a finales de octubre, tal y como avanzó en exclusiva El Diario el día 24 del pasado mes.
El propio Imaz diseccionó la hoja de ruta de Repsol, una estrategia en la que prevé invertir 18.300 millones hasta 2025 con el objetivo de alcanzar 7,5 GW de generación con bajas emisiones en ese horizonte, una capacidad que se doblaría hasta los 15.000 GW en 2030, todo ello con el propósito de ir reduciendo de forma progresiva las citadas emisiones, un 25% al final de la década.
INTENCIÓN DE REPSOL
PASOS PENDIENTES
A preguntas de este periódico durante la rueda de prensa telemática acerca de qué factores habían pesado para decidir llevar el proyecto adelante, el consejero delegado entró más en detalle sobre los próximos pasos de Aguayo. «Tenemos una ambición y un deseo claro de llevar Aguayo adelante. En segundo lugar, todavía va a necesitar una adaptación. Tiene que definirse la regulación, en qué marco va a trabajar... Hay factores que tienen que definirse todavía. Para Repsol Aguayo es un proyecto importante. Vamos a hacer todo lo posible para que salga adelante, al igual que la Administración, todas ellas», comenzó.
Noticia Relacionada
No sólo eso. «El presidente de Cantabria -Revilla- ya ha dicho que es un proyecto fundamental para la Comunidad y comparto totalmente su reflexión. Además, creo que para el propio sistema eléctrico español es un una iniciativa importante, ya que puede permitir tener una generación base de electricidad mayor gracias al almacenamiento que permita un mayor desarrollo de la generación renovable y también del hidrógeno», subrayó.
Para Imaz, «dados estos condicionantes, en el camino vamos a ser capaces de buscar condiciones para que Aguayo avance. Tendrá un trabajo de ingeniería en el que deberemos afinar la inversión. Ya se está avanzando en ese trabajo. Estamos hablando de unos 700 millones para una ampliación de 1.000 MW de los 360-370 que tiene ahora de capacidad. Mil megavatios de almacenamiento es mucho. Es básico para el desarrollo de la generación renovable en España y vamos a apostar por ello», dijo.
Según avanzó Repsol, el Ebitda del área de generación de bajas emisiones se multiplicará por ocho frente al resultado de 2019, hasta los 331 millones de euros, mientras que las inversiones alcanzarán los 1.400 millones de euros anuales en 2025, ocho veces superiores a las realizadas en 2019.
Respecto al funcionamiento de la ampliación, más allá de las lógicas adaptaciones, será similar al del proyecto inicial perfilado para Aguayo. El plan presentado hace casi diez años consistía básicamente en la construcción de dos nuevas tuberías subterráneas de 1,5 kilómetros de longitud, casi paralelas a las actuales, y una caverna igualmente soterrada en la que se ubicarían las turbinas. Con las nuevas instalaciones en marcha, en lugar de las 33 horas que tardaba en llenarse el embalse superior, el bombeo de agua se completaría en ocho horas en cualquier día. Además, en sólo seis jornadas se podrá turbinar ese caudal, lo que se traduce, en general, en una mayor producción de energía en menos tiempo. En las estimaciones iniciales se contemplaba una producción de 2.000 GWh cada año tras la inversión.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.