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Las negociaciones entre la dirección de Liberbank y los sindicatos siguen sin avanzar, después de que ayer finalizara sin ningún acercamiento la segunda reunión para ... consensuar los ajustes de los costes laborales que quiere aplizar el banco. Se ha concocado una nueva cita para el próximo jueves por la tarde, el mismo día en el que por la mañana se celebrará una concentración de delegados sindicales ante el Banco de España, en Madrid.
La entidad que dirige Manuel Menéndez mantuvo, en la reunión de ayer, todos los puntos de la propuesta de recortes, que los representantes de los trabajadores rechazan de plano. Aunque las medidas no contemplan despidos, sí incluyen bajada de sueldos durante tres años. El banco insiste en su plan para ahorrar 23 millones de euros al año.
Los sindicatos «que se mantienen unidos en sus propuestas», presentaron un informe «refrendado por todos salvo por CSI», según fuentes de UGT. En el documento se rebaten «los argumentos para mantenernos en un recorte permanente». A juicio de la parte social, «no tienen fundamento económico salvo el de retribuir a los accionistas con los recortes a la plantilla».
Mantienen que «no hay causas económicas u organizativas que avalen la decisión empresarial de las medidas de recorte anunciadas». Se cuestiona y rechaza el documento planteado por el banco por «la utilización del margen bruto como indicador de la 'disminución persistente de los ingresos ordinarios'». Los sindicatos recuerdan que «en todos los procesos anteriores», el epígrafe de la cuenta de resultados utilizado por el mismo técnico «siempre fue el margen de intereses».
Y es más, los sindicatos resaltan que en el informe que firmó este mismo técnico en junio de 2017, algunas partidas que forman parte de dicho margen bruto «fueron calificadas por escrito (y en sede judicial) como no recurrentes y extraordinarias». Consideran que «todo ello supone una contradicción evidente que trasgrede la buena fe que debe presidir estos procesos».
Uno de los argumentos esgrimidos por el banco es la finalización en diciembre del ERE vigente. Pero los representantes de los trabajadores destacan que no se dice nada de cuestiones como la eficiencia, la morosidad, la liquidez o la solvencia que «dan cuenta de la competitividad de la entidad». Los sindicatos creen que es porque dichos indicadores «han experimentado una evolución muy favorable desde la firma del ERE anterior, con toda seguridad por el esfuerzo reiterado que se le viene pidiendo a la plantilla desde el año 2012 de forma ininterrumpida».
Liberbank plantea una reducción salarial de entre el 5% y el 8,75% para los sueldos por encima del convenio y la suspensión de aportaciones a planes de pensiones durante el periodo 2020-2022, entre otras medidas. La plantilla es de más de 3.000 trabajadores, de los que 400 se sitúan en Cantabria. El banco logró 96 millones de euros de beneficio hasta septiembre, lo que supone casi un 11% menos que en el mismo periodo del año pasado.
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