El Parlamento europeo rechaza finalizar las emisiones gratuitas de C02 a partir de 2030

No hubo acuerdo. La industria española, y por extensión la cántabra, salvó ayer un 'match ball' después de que el Parlamento Europeo reunido en Estrasburgo no alcanzase una mayoría para sacar adelante el nuevo calendario para la finalización de las emisiones gratuitas de C02, después de que la Comisión de Medio Ambiente plantease una hoja de ruta en las que eliminaba estos derechos a partir de 2030, con una reducción progresiva desde 2026. La iniciativa, en la práctica, ponía más presión a industrias como Solvay, Reinosa Forgings & Castings, Global Steel Wire o Ferroatlántica, entre otras.

En el seno del Parlamento había un plácet generalizado para adelantar el fin de la gratuidad de los derechos de emisión, pero solo hasta 2034. La mayor parte de los diputados aceptaron ese nuevo calendario, propuesto en una de las enmiendas presentadas. Sin embargo, dicha propuesta incorporaba otras medidas con la que varios grupos políticos no estaban de acuerdo, según avanzó La Nueva España.

En consecuencia, el contenido final no gozó de la mayoría suficiente para superar el primer trámite político de la iniciativa del pacto verde. Ante el fracaso del tema central de la mañana, se retiró el otro asunto capital para la industria cántabra, el denominado 'ajuste en frontera'.

Ante el calendario sostenible que impulsa la Unión Europea, las industrias comunitarias se ven en desventaja ante las regiones que no tienen imposiciones climáticas, como China, India o Turquía, entre otras, por lo que la UE planteaba una especie de arancel para penalizar los productos que no cumplen con requisitos climáticos similares a los continentales. Este 'ajuste', al igual que el calendario sobre los derechos gratis de emisiones, regresará a la Comisión de Medio Ambiente.

El escenario, por tanto, se modifica. Las medidas, pese a no haber prosperado en su primera intentona, volverán al Pleno tras ser retocadas por los miembros del comité. Sin embargo, su aprobación tendría un camino complicado por delante pese a recibir luz verde de la Eurocámara. La nueva normativa debería someterse a una negociación con el Consejo de Europa.

Precisamente el martes la gran industria ya advirtió sobre esta medida. En un comunicado, las industrias representadas por AOP (refino), Aspapel (papel), Feique (química y farmacia), FIAB (alimentación y bebidas), Oficemen (cemento) y Unesid (siderurgia) manifestaron su apoyo al desarrollo de políticas que favorezcan una transición justa, inclusiva y competitiva hacia la neutralidad.

• Temas
• Global Steel Wire
• Consejo de Europa
• Unión Europea
• Estrasburgo
• Industria en Cantabria