Los pensionistas cántabros cobran un 1,7% más que la media estatal

USO no duda de que las pensiones y el futuro del sistema «debe ser uno de los platos fuertes» que tiene que abordar el próximo Gobierno de España. El estudio, realizado con datos del INSS, establece una radiografía de los pensionistas cántabros. El número de beneficiarios en el conjunto de las modalidades de prestaciones contributivas es actualmente de 141.211 personas, lo que supone un 9,4% más que hace diez años. Durante ese mismo periodo, la evolución en el conjunto del país fue de un crecimiento del 14,2%, casi cinco puntos más elevado que Cantabria.

Un cántabro cobra actualmente de media 1.044 euros de pensión. Aunque es un 33% más que hace una década, si se tiene en cuenta la inflación, el incremento es del 21%, un 1,7% más que la media del Estado.

En lo referido a la jubilación, los beneficiados cántabros suman actualmente 86.471, un 14% más que hace diez años y cinco puntos menos que en el ámbito estatal que creció un 19% en el mismo periodo. La pensión media de un jubilado cántabro es de 1.209,94 euros, un 23,88% por encima del IPC acumulado. La evolución de las pensiones medias estatales fue dos puntos inferior a la media cántabra.

En cuanto a la edad media de acceso real a la jubilación, los cántabros que se retiran dentro del sistema general de la Seguridad Social lo hacen 1,7 años más tarde que la media nacional. El Icane fija esta edad en 63,9 años de media, mientras que en el conjunto del país es de 62,2 años.

El eslabón más débil del sistema es el referido a las pensiones por viudedad. En Cantabria se incrementaron en el periodo de estudio cuatro puntos más que la media nacional y un 20,6% por encima del IPC acumulado. La pensión media de las 35.551 viudas que hay en la comunidad es de 741,98 euros, frente a los 712,19 del Estado. El número de beneficiadas creció un 2% en la última década, mientras que en el conjunto de España aumentó un 4%.

El sindicato achaca a los obstáculos al reconocimiento de incapacidades permanente, tanto por el INSS como por los Juzgados de lo Social, la disminución de personas que perciben ese tipo de pensión en Cantabria. En julio de 2009 existían 13.978 beneficiarios. Transcurridos diez años son 13.355, es decir, un 4,4% menos. A nivel estatal el incremento ha sido en sentido contrario, se ha elevado un 4%, es decir 8,4 puntos superior a Cantabria. El nivel medio de las pensiones en este colectivo de trabajadores con reconocimiento de incapacidad laboral es de 1.021,97 euros. Ha crecido un 14% en diez años y sólo 1,8% por encima del IPC.

Por su parte, el costo mensual de las pensiones contributivas en Cantabria, a satisfacer por parte de la Seguridad Social, asciende a 148 millones de euros. Durante la última década la cifra se ha elevado un 45%.

El sindicato reclama reformas en el sistema en base a una serie de circunstancias. EnCantabria, el 21,6% de la población es mayor de 65 años. «Al igual que todos sus vecinos de la cornisa, nuestra región se sitúa a la cabeza de regiones más envejecidas», advierte USO, que considera que «el futuro no es nada halagüeño».

Así, la comunidad encabeza el ranking de regiones con menos natalidad, no solo de España sino del mundo, ya que la mujer cántabra tiene una media de 1,12 hijos. Todo ello hace que mientras en la media del Estado los trabajadores activos que soportan a cada pensionista sean 1,99, en Cantabria se reduce a 1,52.

El sindicato demanda una revisión del sistema «para garantizar su supervivencia para las actuales y próximas generaciones». Para USO, «el tiempo se acaba» y resulta una «irresponsabilidad» no buscar fórmulas desde el Pacto de Toledo, «dentro de la unidad del sistema como premisa básica y fundamental». Al mismo tiempo «nuestra región necesita dar un giro importante en su modelo económico para evitar la obsolescencia del bienestar social que venimos disfrutando».

Las propuestas de USO pasan por «favorecer en Cantabria, mediante políticas activas, la natalidad para alcanzar al menos la media nacional en un horizonte cercano». También se considera necesario «fomentar la ampliación voluntaria de la edad jubilación con incentivos económicos». Otras sugerencias son evitar déficits estructurales en el sistema mediante los Presupuestos Generales y la eliminación de topes salariales.