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La pandemia del Covid-19 ha introducido tantos cambios en las rutinas cotidianas que algunos de los cuales están generando nuevas tendencias de comportamiento como se plasman en el crecimiento de comercio electrónico, en la digitalización de los negocios y en la entrega de prácticamente cualquier bien o servicio a domicilio. Desde las instituciones y organizaciones empresariales se ha reforzado en las últimas semanas el mensaje de que ahora es más preciso que nunca apostar por el comercio de proximidad y por el producto local. La Consejería de Innovación, Industria, Transporte y Comercio del Gobierno de Cantabria se ha alineado con este objetivo y ha creado, con la colaboración de El Diario Montañés, una plataforma en internet que nace con el propósito de facilitar a cualquier ciudadano de la región el acceso fácil, cómodo y directo a proveedores de todo tipo de productos o servicios de primera necesidad.
Con el lema «¡Quédate en casa, pero que no te falte de nada!» surge 'Cantabria a domicilio', una web que pone disposición de todos los ciudadanos un listado completo de empresas, comercios y autónomos que envían los productos a domicilio o bien tienen tienda on line. Los establecimientos se ordenan por especialidades y municipios, pero también se pueden localizar en un mapa.
La participación es totalmente gratuita para todos los negocios y no implica compromiso alguno. Para inscribirse es necesario entrar en la web y rellenar un sencillo cuestionario con el nombre de la empresa, dirección, teléfono y condiciones de la entrega a domicilio.
Hasta el momento se han inscrito un total de 752 empresas de acuerdo al siguiente desglose: Alimentación (82); Alimentación animal y clínicas veterinarias (100); Comida preparada (85); Equipos tecnológicos y de comunicaciones (101); Óptica, ortopedia y otras profesiones sanitarias (96); Prensa y papelería (90); Venta de productos higiénicos (84) y Otras actividades (114). Las inscripciones siguen abiertas ya que la página tendrá continuidad más allá de la pandemia.
Este modelo que da visibilidad a los negocios está teniendo una gran acogida, demostrándose la necesidad que existe de profesionalizar la digitalización del comercio. Con esta pandemia ha aflorado que se precisan plataformas donde sea posible trabajar 24 horas durante los 7 días de la semana en una tienda virtual que debe ser un complemento de la tienda física, porque el nuevo cliente del siglo XXI ahora quiere comprar de otro modo. Y para poder ser una alternativa a los grandes portales, el comercio local y regional debe trabajar unido y compartir plataformas como ésta que permitan contactar con el cliente a través la propia web de cada negocio, por correo electrónico, por teléfono o por whatssap, sin intermediarios ni comisiones.
El apoyo institucional supone para comerciantes, restaurantes y productores una ayuda importante. «Puedo llamarlo superación o innovación, pero en cualquier caso es una oportunidad para ponernos al día», dice Tomi López, de la Carnicería Antón en Santander. «Como se suele decir, no hay mal que por bien no venga. Hacía tiempo que tenía pensado poner en marcha el servicio a domicilio y mira en que momento arrancamos. Para los clientes que no pueden salir o venir hasta el centro es muy cómodo, se lo llevamos a casa perfectamente preparado».
Carolina Entrecanales, de Granja Cudaña, en Valdáliga, reconoce que la venta puerta a puerta les está permitiendo «cuidar a muchos clientes que de otra manera hubieran estado desabastecidos. En menos de 24 horas tienen nuestros productos en casa».
Para la hostelería, concretamente los restaurantes, el servicio a domicilio se ha convertido en una tabla de salvación y por el momento la única manera de seguir facturando. «Para nosotros es más que una oportunidad poder llegar a las casas de nuestros clientes en estos momentos», asegura Julio Ramírez, del Restaurante Santander Veinte. «Es un servicio que ya ofrecíamos pero agradecemos toda iniciativa decidida a apoyar la viabilidad de los negocios».
El Restaurante Posada Somavilla, en el municipio de Ribamontán al Mar, comenzó una nueva etapa con nueva dirección hace un año y las circunstancias les obligan a adaptarse. Juan Carlos Polo, su propietario, explica que «sta encrucijada también nos ofrece una nueva forma de hacernos más visibles y no queremos perder la oportunidad de que todos los cántabros nos conozcan».
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