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LAURA FONQUERNIE
Santander
Sábado, 6 de julio 2019, 07:57
Emprender en un país extranjero nunca es fácil. Por eso el Plan Cantabria 2030 busca dibujar un mapa entre los 40.000 profesionales cántabros que trabajan en el extranjero y las empresas locales. Uno de ellos es Julio Ceballos, director del Grupo Telepizza en Asia ... y asesor de empresas europeas que quieren hacer negocios en China, que ayer presentó los avances de la iniciativa en la sede de la CEOE en Santander.
-¿Qué busca conseguir la red de talento cántabro?
-Pretende cumplir dos funciones, poner al servicio del tejido regional empresarial una serie de recursos que a día de hoy no se están capitalizando y dar visibilidad a profesionales de una trayectoria fantástica, que no se conocen en la región. Es una hoja de ruta que tiene como finalidad garantizar la calidad de esta Comunidad, que está amenazada por una serie de riesgos que van desde el envejecimiento de la población hasta la pérdida de talento y de competencia de algunos sectores tradicionales. La CEOE detectó cuáles eran las palancas para revertir esa tendencia. Es uno de los estudios que abarca todos los sectores productivos. En él se sugieren soluciones y propuestas para mejorar la competitividad regional y garantizar la calidad de vida. El objetivo es que en Cantabria dentro de 11 años se siga viviendo igual de bien.
-¿Qué puede hacer Cantabria para repatriar el talento o evitar que se vaya?
-Debe, en primer lugar, identificar que hay un valor añadido vinculado a la región. La red de talento cántabro es en sentido amplio, no necesariamente el estrictamente académico. Buscamos a profesionales que trabajen en el extranjero. Para poner en el radar a gente que o se ha formado en Cantabria o ha nacido o tiene algún vínculo y que a su vez tiene conexión con el extranjero. Entendemos que en mercados diferentes al español se desarrollan unas capacidades cada vez más útiles. Ya no existen trabajos para toda la vida y lo que se exige en el nuevo mercado laboral, que es incierto, dinámico y volátil, son competencias versátiles. El plan ha identificado cuál es el tipo de competitividad que se va a exigir a las empresas en 10 años. Y es la llamada economía 4.0, en el 2030 el mercado laboral va a ser completamente diferente. Hará falta gente multidisciplinar, que tenga un abanico de competencias muy elevado.
-¿Cómo ve desde fuera a Cantabria como Comunidad?
- Se vive muy bien y no se trabaja tan bien. Yo llevo en China 15 años y es un lugar en el que se trabaja muy bien porque hay una flexibilidad horaria total. Un chino te puede estar enviando mails de trabajo el día del año nuevo chino, pero no se vive bien, no hay conciliación entre la vida laboral y personal. La gente vive por y para trabajar. Aquí la gente trabaja para vivir. Tienen muy claro que el trabajo es un medio y no un fin.
- Ha estado en muchos países, ¿por qué decidió quedarse en China?
-He vivido en países con una calidad de vida y un estado de bienestar muy alto, empezando por España. China no es uno de ellos, pero es un lugar de oportunidades y muy dinámico donde todo está por hacer y donde alguien con espíritu emprendedor y ganas de trabajar se come el mundo. En España echo de menos ese espíritu y la flexibilidad. Aquí está todo muy encorsetado. Cuando hay margen de negociación las cosas salen. Cuando todo está tabulado, es complicado. En China se vive muy mal, es la antítesis a esto.
-¿Hay muchas empresas cántabras interesadas en ir a China?
-Sí. Las principales empresas cántabras ya conocen el país. No todas tienen oportunidades de mercado allí. Es un mercado que muta completamente cada tres años. Quien no tenía oportunidades hace ocho años, las puede tener ahora. Con Pronovias, a lo largo de 10 años, he visto tres dinámicas de mercado que en España se ven a lo largo de 40.
-¿Cuáles son las peculiaridades profesionales con las que se encuentran las empresas?
-Las formas de hacer negocio y la comunicación intercultural. Nadie puede poner en marcha un negocio sin personas con las que te tienes que comunicar. Hacen falta profesionales que conozcan la realidad de cada mercado.
Se busca talento emigrado. Aproximadamente 40.000 cántabros trabajan alrededor del mundo. Profesionales que compiten en mercados internacionales y que pueden aportar valor humano y experiencia a empresas locales. El problema radica en que, para la mayoría de las empresas y personas de la región, son desconocidos.
De ahí nace el objetivo de la red de talento cuyos avances se presentaron ayer en la sede de la CEOE en Santander. Los datos: durante el período que lleva en activo se ha contactado con más de 1.000 cántabros de 17 países diferentes cuya media de edad es de 38 años. Y más de 100 se han registrado ya en la página web de la patronal. De los cuales casi el 60% viene de países europeos y el 61% son mujeres.
La idea es crear un mapa virtual, que permita a las empresas de Cantabria ponerse en contacto con personas que conocen el mercado. Una red inclusiva que diga de forma concreta dónde están los profesionales que previamente se hayan registrado en la web de la CEOE. «Es un proyecto dirigido a las empresas cántabras que permite poner en valor el capital humano ligado a la región», explicó Francisco Zunzunegui, responsable de la palanca Talento y Personas de Cantabria 2030. «Durante años nadie nos ha tenido en el radar y es una manera de visibilizar ese capital humano con un patrimonio de experiencias personales y profesionales de mucho valor», comentó Julio Ceballos, ponente durante la jornada. Se pretende rescatar el talento cántabro actualmente deslocalizado.
También buscan la promoción de la FP Dual y trabajan con las universidades, que ayer presentaron sus másteres, porque son «ellas quienes ponen el conocimiento a disposición de las empresas».
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