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SEG Automotive espera que la tempestad que zarandea en la actualidad a la industria de la automoción, sumida en una parálisis que ha impactado de lleno tanto en las fábricas como en toda la cadena de producción de componentes, sea pasajera y las aguas ... vuelvan a su cauce más pronto que tarde, una vez se aclaren las incertidumbres regulatorias y se allane el camino de transición hacia una electrificación futura de los vehículos, en la que la fábrica que la compañía tiene en Treto está perfectamente orientada para aprovechar las sinergias que se puedan generar. Pero de momento toca apretar los dientes y capear el temporal de hoy en día, así que la organización ha propuesto un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por un año, todo 2020, con un mínimo de siete días en desempleo por trabajador y un máximo de 48 durante el periodo afectado.
Tal y como adelantó ayer este periódico, el ERTE está motivado por la caída en la producción de automóviles a nivel europeo que, en consecuencia, ha supuesto una rebaja de la demanda de alternadores y motores de arranque, ámbito en que se especializa la factoría ubicada en la zona oriental de la Comunidad. En este sentido, se ha visto igualmente afectada la línea de producción del modelo híbrido BRM, la solución innovadora con la que SEG Automotive, desde Treto, pretende liderar el mercado en esta época de interinidad hasta que se consoliden los motores plenamente eléctricos, una situación que no sucederá al menos en el medio plazo.
850
trabajadores tiene de forma aproximada SEG Automotive en su plantilla. No obstante, la organización ha rebajado su cantidad de personal eventual en los últimos tiempos a tenor de las condiciones de mercado caracterizadas por una caída de la actividad y, en consecuencia, menor carga de trabajo en el complejo.
15.000
alternadores diarios puede fabricar la planta cántabra, con un registro anual de cinco millones. A día de hoy, con los condicionantes del sector, estas cifras se han visto rebajadas a un ritmo de doble dígito.
Después de la cita fallida del lunes, en la que la compañía no pudo entregar la documentación justificativa del expediente ante la negativa de UGT a firmar el recibí hasta estudiar la problemática, ayer sí que se ofreció al comité de empresa -formado por la propia UGT, CC OO, USO, CSIF y AST-Sauga- la información pertinente para abrir el plazo legal para negociar. Tras el encuentro, que se prolongó durante apenas media hora al ser un trámite formal, el presidente del comité de empresa, Moisés Huerta (UGT), explicó a Efe que «aún están estudiando el documento presentado», por lo que no se aventuró a efectuar ninguna valoración en profundidad al respecto de la medida promovida por la organización.
«Si no se venden coches, no se venden piezas. Y al existir un descenso de la actividad nos ha salpicado a nosotros que fabricamos elementos para los automóviles», lamentó de forma pragmática el sindicalista.
Huerta igualmente avanzó que el siguiente paso, mientras los sindicatos analizan el informe, será establecer un calendario de reuniones con la Dirección para llegar a un acuerdo de cara a la regulación. En principio, el siguiente cónclave tendrá lugar el próximo lunes, 2 de diciembre.
Si bien la plantilla se mantiene «expectante» ante estos hechos, el portavoz del personal confesó que los trabajadores «están respondiendo de forma responsable y cumpliendo con sus tareas en la empresa».
El ERTE, cuyo contenido definitivo deberá ser ratificado en las próximas reuniones, no es más que la continuidad de las medidas que SEG Automotive ha tenido que aplicar en su planta cántabra en los últimos meses. Sin ir más lejos, El Diario ya informó hace un mes que la Dirección había pedido al comité negociar un incremento en la flexibilidad superior al que recogía el convenio colectivo.
Finalmente ese margen del que echar mano se ha agotado y la organización combatirá los vaivenes del sector con este ERTE. Se espera que en el segundo semestre de 2020 la situación pueda ir mejorando de forma progresiva.
SEG Automotive nació en 2018 tras la venta de la división de Motores de Arranque y Alternadores del grupo Bosch, implantando innovaciones en el sector del automóvil como la invención del motor de arranque, el sistema Start/Stop o la hibridación suave.
Adquirido por la compañía china ZMJ, este proveedor internacional trabaja también en la transición a través de ingenierías de combustión más eficientes, híbridos de 48v y electrificación. Cuenta en su base con un equipo intercultural de más de 8.000 empleados en 14 países y tiene presencia en los mercados del sector más importantes del mundo.
SEG Automotive tiene hoy en día una plantilla en Treto que se acerca a las 850 personas. Es uno de los pesos pesados de la industria de la Comunidad y una de las 'joyas' de la zona oriental regional.
trabajadores tiene de forma aproximada SEG Automotive en su plantilla. No obstante, la organización ha rebajado su cantidad de personal eventual en los últimos tiempos a tenor de las condiciones de mercado caracterizadas por una caída de la actividad y, en consecuencia, menor carga de trabajo en el complejo.
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