El Puerto de Santander construirá el Muelle 6 de Raos y completará el 9

«En absoluto nos vamos a conformar con el buen cierre del año 2023, que fue histórico en lo que se refiere a tráfico de mercancías con casi 7 millones de toneladas». Así lo explicó este viernes el presidente de la Autoridad Portuaria, César Díaz, en la presentación de los tres proyectos que plantean iniciar este año ya que en la estación marítima están «convencidos de que el futuro de Santander pasa por seguir mejorando nuestras infraestructuras y optimizar cada metro cuadrado de nuestra zona de servicio».

Precisamente en eso está focalizada la construcción del Muelle de Raos 6, el proyecto «más importante», en palabras de Díaz, de los tres que elevan el ancla ahora. El mismo estará situado en el espigón norte y viene a completar la alineación de una zona que tiene un ligero «mordisco de superficie» en el que actualmente los barcos no pueden atracar. Para completar ese espacio se va a acometer en dos fases. La primera, que es la que se está planteando ahora, consiste en completar un tramo de aproximadamente 212 metros para alinear ese hueco con el muelle colindante, el 5, que queda a su derecha. La nueva estructura tendrá un calado mínimo de 10 metros y estará construido con una pantalla de 1,85 millones de kilos de acero en tablestacas metálicas que se empotran en el fondo marítimo. El destino de esta infraestructura será multipropósito para tráfico de mercancías general y también de graneles sólidos.

El presupuesto de la actuación asciende a 24,5 millones de euros, tendrá un plazo de ejecución de 20 meses, aunque eso será una vez que comiencen las obras para lo que hay que hacer gestiones previas como dar traslado a Puertos del Estado y requiere también que el Consejo de Ministros dé su visto bueno. Díaz calcula que, de salir todo sin inconvenientes, se puedan licitar las obras antes del verano para que comiencen antes de que termine este año. La intervención no incluye la fase dos de este Muelle 6, que consistiría en completar otro tramo de 113 metros para alinear con el otro espacio que queda a la izquierda, conocido como Muelle de Nueva Montaña, y que la previsión es que se acometa más adelante, con un importe que cifran en 10 millones de euros.

Los otros dos proyectos están vinculados y vendrán a completar el «tan ansiado Muelle de Raos 9» (el último espacio ganado a la bahía con rellenos) que la APS espera inaugurar a lo largo de este mes. Consisten en dotar a la infraestructura de un tacón en la parte norte (un tablón de hormigón de 60 centímetros de canto y con forma de 'L' sustentado por pilotes de 1,20 metros de diámetro en 2.650 metros lineales para lo que hará falta 1,5 kilos de acero y 4.900 metros cúbicos de hormigón) junto a una rampa flotante que se une al tacón mediante unas rótulas con un puente de acero con una longitud de 34 metros. Ambos añadidos suponen una inversión de 10,2 y 4,9 millones de euros respectivamente, cuyas obras también esperan iniciar antes de que acabe este año con plazos de ejecución de entre 6 y 9 meses y que vendrán a dar mayor «versatilidad y operatividad» al Muelle 9 para que puedan atracar buques roro con rampa trasera y no solamente con rampa lateral.

Para Díaz estas tres actuaciones conllevan que el puerto «siga impulsando el desarrollo sostenible del sector productivo de nuestro entorno y refuerza nuestra contribución a la actividad económica de Cantabria, además de generar empleo». Asimismo, este nuevo paquete de inversiones se añadirán a las que ya están puestas en marcha, con una suma de 41 millones, y que incluyen, entre otras, además del Muelle 9, la rampa roro para Raos 7 y 8, el apartadero del ferrocarril en el espigón norte de Raos y la renovación de la vía del ferrocarril en el espigón central de Raos. También está ahí incluida la iluminación led de la red viaria del espigón central, la renovación de la embarcación de servicio de la Autoridad Portuaria, la pavimentación de la campa de raos 9 y la rehabiltiación del Palacete del Embarcadero por un importe de1,4 millones de euros.