

Secciones
Servicios
Destacamos
santander. Global Steel Wire (GSW), uno de los principales pulmones industriales y empresariales de Cantabria, ha podido levantarse en los últimos meses del impacto generado ... por la pandemia en 2020, donde la compañía arrojó un resultado de ejercicio negativo de 22,41 millones de euros, frente a los números negros de poco más de 12 millones de 2019. Un socavón que a lo largo de 2021, un año no exento de complejidades y con la amenaza creciente de la escalada en los costes energéticos, ha podido remontarse, hasta el punto de que la planta santanderina carbura en la actualidad a niveles iguales o incluso superiores a los anteriores al desembarco del covid.
12millones fue el deterioro por impacto covid en Global Steel Wire en 2020
30millones es el Ebitda logrado por la planta santanderina en la primera mitad de 2021
Así lo confirman fuentes conocedoras de la evolución del Grupo Celsa, corporación industrial de origen catalán donde están integradas no sólo la propia GSW, sino igualmente otras fábricas enclavadas en la Comunidad como Tycsa o Global Special Steel Products, antigua Trefilerías Quijano en Los Corrales.
El pasado año arrojó un duro castigo para GSW, al igual que para la amplia mayoría del tejido empresarial y social. A las restricciones sanitarias se sumaron unos meses en los que la factoría de Nueva Montaña tampoco pudo trabajar con normalidad por la ausencia de materia prima. Global Steel Wire se abastece de chatarra, que en la primavera de 2020 destacaba por su escasez.
Como ejemplo, la fábrica santanderina atribuye un deterioro por impacto del covid-19 de 12 millones el pasado ejercicio, principalmente en activos inmobiliarios que, espera, puedan ir reponiéndose con el paso del tiempo.
Fruto de ese funcionamiento a medio gas, las cifras de ventas se desplomaron de los 613 millones en 2019 a unos ingresos de 455 en 2020. Una caída del 26% debida fundamentalmente a que la pandemia provocó una evolución negativa de los precios en el sector del acero, motivada por una disminución de la demanda que en toda Europa y en el mercado español alcanzó una media del 30%, en un contexto de desaceleración de la economía y una histórica caída del Producto Interior Bruto (PIB).
Sin embargo, esa preocupante tendencia se ha revertido. El buen posicionamiento de Celsa Group ha capturado buena parte de la recuperación del mercado en 2021, favorecida por su producción con horno eléctrico en vez de con carbón y el cierre de producción para exportaciones de países como China o Rusia. Todo ello, en una coyuntura de demanda vigorosa, ha coadyuvado a que el Grupo alcance unos datos por encima de las previsiones, consiguiendo «ampliamente» los objetivos planteados en su nuevo plan estratégico 2021-2028. La compañía prevé cerrar globalmente este ejercicio, sumando la aportación de todas sus sociedades en España y sus firmas internacionales, con una facturación récord en su historia cercana a los 5.200 millones y una generación de ebitda de 600. En Santander, según fuentes conocedoras, el Ebitda hasta junio ronda los 30 millones.
La oportunidad ofrecida por una demanda creciente ha sido aprovechada por Celsa gracias a su modelo de producción de acero reciclado que conlleva autonomía sobre el hierro y el carbón procedente de minas y una producción con bajas emisiones de CO2. La integración de la cadena de valor de producción de acero bajo un modelo circular que fabrica nuevo acero a partir del reciclaje concuerda ahora plenamente con el nuevo paradigma de la economía mundial 'poscovid' en la que la recuperación económica propugna la reconstrucción de mercados de aprovisionamiento regional y la producción sostenible como palancas de desarrollo futuro.
GSW ha sido fundamental en este camino. La producción de alambrón que se lleva a cabo en las plantas de Cantabria es fundamental para el grupo, ya que Celsa lidera este segmento en Europa, y ha significado este año una de las palancas de crecimiento en un mercado creciente tras la depresión de 2020.
Fuentes próximas al grupo industrial apuntan que la apuesta por GSW se mantuvo intacta en 2020, año en el que se realizaron las inversiones previstas en la compañía cántabra evitando de esta manera una pérdida de competitividad. En total se acometieron mejoras por 18 millones. Esta nueva apuesta se suma a los 380 millones invertidos por el grupo en Global Steel Wire en los últimos 20 años.
. Más allá de que el Grupo Celsa se haya visto favorecido por la coyuntura mundial en el mercado del acero, con una alta demanda y gigantes como China o Rusia cerrando el grifo de las exportaciones, tanto la matriz de Global Steel Wire como los fondos buitre que ostentan la deuda de la corporación siguen totalmente pendientes de la solicitud que la organización realizó a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). La empresa pidió al organismo estatal poder acogerse al fondo de rescate articulado para compañías estratégicas fuertemente impactadas por la pandemia, con una solicitud inicial de 700 millones.
El movimiento se produjo a finales de 2020, por lo que casi ha transcurrido un año sin que la SEPI todavía haya resuelto un expediente que simplemente por el volumen del montante ya refleja su complejidad.
Por el camino, las tensiones con los acreedores después de que el calendario de pagos se viese judicializado al acudir Celsa a los tribunales aduciendo que por las circunstancias pandémicas sobrevenidas le era imposible cumplir con los plazos estipulados.
Desde entonces no se ha dado respuesta a esa hoja de ruta a la espera de que la Justicia resuelva, con los fondos a la expectativa de poder tomar el control de la corporación catalana propiedad de la familia Rubiralta.
No obstante, en el entorno de la operación se da por hecho que ambas partes esperan a la resolución de la SEPI para poder dar respuesta a esas deudas pendientes.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.