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La necesidad de mejorar el mercado laboral, especialmente tras los efectos de la pandemia llevó a la puesta en marcha en Cantabria de nuevos incentivos a la contratación indefinida. La Consejería de Empleo y Políticas Sociales ha superado con creces las expectativas ya que ... el Emcan ha recibido más de un millar de solicitudes para acogerse a estos incentivos que aprobó a comienzos de julio. En apenas un mes, las 1.227 instancias presentadas superan todas las previsiones del Gobierno cántabro, que esperaba recibir en torno a un millar de peticiones a lo largo de todo el año.
El pasado 5 de julio se publicó en el Boletín Oficial de Cantabria el nuevo decreto que incrementa la cuantía de las subvenciones y flexibiliza los requisitos al actual contexto de pandemia, tal y como se acordó con patronal y sindicatos en la mesa del diálogo social.
El programa acoge dos líneas de ayudas directas: para la formalización de contratos indefinidos iniciales y para la transformación de temporales, que de momento es el que mayor tirón está teniendo entre el empresariado. En el primer caso, el Servicio Cántabro de Empleo puede llegar a apoyar dicho contrato con hasta 9.000 euros, y en el segundo caso con 3.000 euros (4.500 euros si se transforma un contrato de prácticas y 5.500 euros si es de formación).
Hasta el momento, de las más de 1.200 solicitudes presentada, el personal del Emcan ya ha mecanizado algo más de la mitad, 651, de las que 503 corresponden a peticiones de ayudas por conversión y 148 por nuevas contrataciones.
«Tenemos que actuar desde la convicción de que la recuperación de la economía y el empleo no puede basarse en un crecimiento meramente cuantitativo de las contrataciones, sin tener en cuenta la fragilidad de los empleos que se crean, las tensiones sociales que eso conlleva y la incertidumbre que genera entre las personas trabajadoras con contratos temporales», ha valorado la consejera de Empleo, Ana Belén Álvarez.
Estos incentivos se enmarcan dentro de la negociación tripartita para hacer frente a la covid-19 y que dio lugar al II Acuerdo del Diálogo Social, en el que también se incluyeron medidas como ayudas para trabajadores y empresas afectadas por ERTE, la convocatoria del Icasst para cubrir gastos en material de protección frente al virus -abierta hasta el 10 de octubre- o ayudas para apoyar la conciliación, entre otras
Hay que recordar que la mayoría de los cerca de 180.000 asalariados de Cantabria -otros 42.000 son autónomos- cuentan con un contrato de trabajo estable. En concreto, el 76%. Es decir, de cada 4 trabajadores, 3 tiene un contrato indefinido. Sin embargo, durante los últimos años la contratación indefinida ha ido perdiendo peso progresivamente, especialmente desde la reforma laboral, de modo que 9 de cada 10 nuevos contratos que se firman en la comunidad son temporales. En 202 se formalizaron en Cantabria 185.883 contratos de trabajo, de los que 172.220 fueron eventuales y solo 13.663 indefinidos. Para tratar de revertir esta situación y promover el empleo estable y de calidad, la Consejería estos nuevos incentivos que se mantendrán vigentes hasta el 31 de diciembre.
El decreto para el fomento de la contratación indefinida no ha sido el único modificado. El 5 de julio también se publicaba en el BOC una nueva versión de las subvenciones para fomentar la contratación juvenil, que igualmente han despertado gran interés. Hasta el ahora se han presentado 140 solicitudes, lo que cuadriplica las presentadas durante todo el año 2020 (31) y triplicar las de 2019 (43).
Para el departamento de Ana Belén Álvarez, uno de los objetivos prioritarios es «generar oportunidades de empleo entre los más jóvenes en aquello en lo que se han formado». Por eso ha mejorado los incentivos a la contratación juvenil y pueden llegar hasta los 18.750 euros de subvención por contrato.
Además de incrementar las cuantías, Empleo también ha hecho extensiva estas ayudas a empresas de hasta 250 trabajadores y no solo financia la contratación inicial, sino también posibles prórrogas para garantizar más estabilidad y experiencia laboral.
Por otra parte, este mismo mes de agosto, Empleo ha resuelto el procedimiento para el pago de los 300 euros a los más de 9.700 trabajadores que estuvieron en ERTE al menos durante un mes entre el 1 de octubre de 2020 y el 28 de febrero como consecuencia de la pandemia, un pago que ya se ha efectuado. El Servicio Cántabro de Empleo está revisando y subsanando un centenar de incidencias que se han producido relacionados con las cuentas bancarias y, por otro lado, está a punto de resolver la concesión de ayudas a empresas afectadas. Serán algo más de 2.200 empresas las que se beneficien de esta convocatoria, con un pago único de 300 euros por cada trabajador en ERTE hasta un máximo de 3.000 euros.
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