«Nuestro enfoque es la personalización y la 'artesanía' del aprendizaje»

La Escueluca ·
Educación y tiempo libre

S. Ceballos

Santander

Miércoles, 27 de noviembre 2024, 09:58

–¿Qué es La Escueluca?

–La Escueluca es un proyecto educativo, que busca enriquecer el aprendizaje a través de experiencias significativas. Ofrecemos actividades tanto para niños como para adultos, siempre orientadas a despertar la curiosidad, la creatividad y el amor por el conocimiento, en un ambiente de aprendizaje activo y positivo.

–¿Por qué decidió emprender con un proyecto como este?

–Desde siempre, hemos sentido que aprender es mucho más que una lección en un libro; puede y debe ser algo que se vive, se siente y se disfruta. Nos lanzamos a emprender para crear ese espacio donde la educación se sintiera fresca, inclusiva y motivadora. Algo que no fuera otro 'aparcamiento de niños y niñas'.

–¿En qué cree que destaca su idea?

–Nuestro enfoque es la personalización y la 'artesanía' del aprendizaje. Cada actividad está diseñada para responder a las inquietudes y talentos de nuestros alumnos. Estamos muy influenciados por la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, que establece que todos somos buenos el algo, pero tenemos que descubrir en qué. Brindamos un abanico de experiencias y competencias que permite a nuestro alumnado descubrirse a sí mismo y, de este modo, que pueda enfocarse en sus potencialidades y en sus gustos, algo que rompe con la visión tradicional de la educación, más centrada en compensar las carencias, lo que muchas veces deriva en la frustración y el fracaso.

«Uno de nuestros pilares es creer que el aprendizaje no entiende de edad, que todo tiene más que ver más con la metodología aplicada»

–¿Quiénes son sus potenciales clientes y qué les aporta su proyecto?

–Uno de los pilares de La Escueluca es creer que el aprendizaje no entiende de edad, que todo tiene más que ver más con la metodología aplicada. Creemos en el componente lúdico como el recurso educativo más potente para cualquier edad, por lo que podemos llegar a cualquier persona. Actualmente llegamos al público general en nuestra sede de Santander, pero también desarrollamos actividades extraescolares en centros educativos de toda Cantabria, prestamos servicios educativos y sociales a diferentes administraciones públicas, etc. A todos estos proyectos les impregnamos, en la medida de lo posible, de nuestra perspectiva educativa, que pone por delante de todo el bienestar social y emocional del individuo.

–¿Qué tipo de actividades realizan desde el centro tanto para público infantil como adulto?

–Para los más pequeños, ofrecemos talleres educativos de todas las temáticas que se os puedan ocurrir, y si no tenemos una temática, la diseñamos y la implementamos. Estos talleres se realizan tanto en nuestro espacio en Santander como en centros educativos de toda la región en formato extraescolar. Además, también realizamos campus urbanos y servicios de conciliación familiar, siempre basados en nuestra perspectiva educativa. En definitiva, espacios donde las familias pueden tener la tranquilidad de que sus hijos e hijas están siendo atendidos por profesionales responsables, implicados y comprometidos con el bienestar físico, social y emocional de sus pequeños. Para jóvenes y adultos, disponemos además de los ya citados servicios de conciliación, de talleres de formación y desarrollo personal. Desde 2018 somos Escuela Oficial de Tiempo libre, desde entonces hemos formado a más de 500 profesionales del ocio y el tiempo libre. Además, La Escueluca también dispone de una 'Escuela de familias' donde nuestros psicólogos ofrecen cursos y talleres sobre el cuidado y el desarrollo de los menores en aspectos que preocupan a las familias.

«Aprender es mucho más que una lección en un libro; puede y debe ser algo que se vive, se siente y se disfruta»

–¿Cómo repercute La Escueluca sobre la zona en la que se ubica?

–Creemos que contribuye al desarrollo educativo, social y cultural de la región. Al atraer a personas de distintas edades y perfiles, dinamizamos la zona, impulsando la creatividad y el aprendizaje como motor de cambio. Así mismo, creemos que La Escueluca tiene un gran impacto como puerta de entrada al mundo laboral para muchos profesionales de la enseñanza, de la intervención social y del ocio educativo.

–¿Qué balance hace hasta el momento ?

–En estos diez años de andadura, el balance es muy positivo. Hemos crecido de forma sostenible, hemos ido ramificándonos en diversos sectores y hemos visto una gran respuesta de la comunidad. Un aspecto a destacar es que sobrevivimos a la crisis sanitaria, momento en el que nuestro sector, el más olvidado en aquel momento, estuvo durante más de un año en parón técnico. Sin embargo, creemos que la resiliencia que mostramos en aquel duro trance nos hace mirar al futuro con entusiasmo. Queremos seguir innovando y contribuyendo al sector educativo no formal durante muchos más años.