Los trabajadores de Sniace retoman la movilización para mantener la unidad productiva

Los trabajadores de Sniace decidieron, en una asamblea celebrada el pasado viernes, retomar las movilizaciones que habían tenido que suspender debido a la declaración del estado de alarma. El principal objetivo es que se mantenga la unidad productiva para que si hace realidad la llegada de inversores se pueda retomar la actividad y se recupere el empleo. Hay que recordar que a finales de mayo se llegó a un acuerdo para aplicar el ERE que supone el despido de toda la plantilla y que, de otro lado, se mantienen contactos con los administradores concursales para conocer la marcha de la liquidación de la compañía. El expediente de regulación ya está tramitándose en Trabajo.

«El pasado viernes hicimos la asamblea en el aparcamiento de Sniace de forma presencial y respetando las medidas de seguridad», explicó el secretario del comité de empresa, Francisco Plaza, a este periódico. En el encuentro se decidió la vuelta a las movilizaciones y la primera de ellas será una concentración en la Plaza Mayor de Torrelavega los próximos días cuando se obtengan los permisos pertinentes.

Plaza recordó que para los trabajadores es fundamental que a la hora de liquidar la compañía se mantenga la unidad productiva para que los inversores interesados puedan adquirirla y planteares la vuelta a a actividad industrial. En esta línea, destacó que el Gobierno de Cantabria también ha reclamado esta posibilidad porque se estima que hay posibilidades de encontrar empresarios interesados. Además, el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla había pedido al de España, Pedro Sánchez, el apoyo para buscar una salida para Sniace tras los intentos de continuar con la actividad en las instalaciones que no tuvieron éxito.

Precisamente, dentro del dictamen de la Comisión del Covid-19 aprobado ayer en el Parlamento de Cantabria, entre las 138 propuestas con medidas para hacer frente en distintos ámbitos a las consecuencias de la pandemia y reivindicaciones al Gobierno de España, se le pide apoyar la viabilidad de Sniace y que pueda desarrollar productos para luchar contra el coronavirus con el apoyo financiero que precise.

El Juzgado de lo Mercantil nº 2 de Madrid es el que lleva la liquidación de Sniace. El auto se dictó el 6 de marzo y en el mismo se declara finalizada la fase de convenio del Grupo Sniace, incluidas las sociedades de Celltech y Viscocel, y se procedía a la apertura del proceso de liquidación de la compañía.

Hay que recordar que fue el 13 de febrero de este mismo año cuando Sniace comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que iba a liquidación al no poder hacer frente a sus compromisos de pago. El desencadenante definitivo fue el anuncio de la Administración central de recortar las retribuciones a la cogeneración, que derivó en la ruptura unilateral del contrato por parte del proveedor energético de la firma cántabra, Cogen, aduciendo que la nueva regulación no hacía rentable la explotación de la instalación.