SEG desconvoca la huelga tras un acuerdo que evita despidos forzosos

El preacuerdo alcanzado modifica la propuesta inicial de SEG, que formaba parte de la puesta en marcha del plan estratégico para la planta cántabra y que tenía como principal objetivo reducir costes para hacerla competitiva en el mercado, lo que suponía un recorte de 20 millones de euros al año.

La primera consecuencia es que no habrá ya 275 despidos (la empresa siempre se ha referido a personas afectadas) y ahora se ofrecen opciones como prejubilaciones, bajas indemnizadas o alternativas de recolocación internas y externas. Concretamente, se ha establecido un plan ordenado de un máximo de 220 salidas de trabajadores por prejubilaciones con edad de acceso a los 58 años o salidas indemnizadas voluntarias.

Asimismo, la rebaja del sueldo prevista inicialmente de un 19% se sustituye por una congelación salarial del año 2021 al 2025 y se hará fijos a 14 empleados, que era algo que estaba «pendiente» ya que existía un compromiso en este sentido.

Se modifica también el sistema de días flotantes incrementando la jornada laboral en 24 horas anuales, con la correspondiente reducción de tres de los mencionados días flotantes.

Según fuentes sindicales, se trata de un «principio de acuerdo» en el que aún «faltan cosas» por atar y hay asuntos que han quedado «por el camino» y que se abordarán en próximas reuniones «cotidianas del día a día» entre comité y empresa, pero se considera «positivo» porque la situación «no era agradable» ni para la empresa ni para los trabajadores, que volvieron a sus tareas en la fábrica la tarde de ayer.

Por eso, esperan que esta «desagradable» situación de tener la fábrica «parada» durante seis días de huelga haya servido de «lección» para ambas partes.

En este sentido, los sindicatos defienden que al menos la actuación ha servido para «desbloquear» una situación provocada por las medidas que pretendía llevar a cabo SEG Automotive y que eran «socialmente inaceptables», por lo que han defendido la importancia del diálogo y de que este tipo de planes sean «siempre consensuados».

Y han recordado que el comité decidió convocar la huelga por la «incapacidad absoluta para negociar» que mostraba la empresa y han considerado «positivo» que la negociación, finalmente, ha conseguido «desbloquear» esa situación y evitar los que consideraban «275 despidos a dedo», sustituyéndolos por salidas bajo jubilaciones o indemnizaciones y evitando externacionalizaciones.

El presidente del comité, Moisés Huerta, proclamó el resultado de la votación y agradeció a todos la participación en estos días de huelga y concentraciones pacificas. «Es el éxito de todos. Hemos dado una lección no solo a la comarca sino a toda Cantabria de cómo pueden hacer las cosas respetando la actividad de otras empresas y de los autónomos de la zona». De otro lado, mostró la satisfacción por hacer acercado posturas con la empresa «teniendo en cuenta de donde partíamos y a donde hemos llegado».

Huerta también palabras de agradecimiento para sus compañeros de comité. «Hemos estado reunidos en el Orecla, en la carretera e incluso algunos han reunido un accidente», comentó. Ademas, el presidente del comité agradeció a todos los que han votado a favor de desconvocar la huelga «y también a los que han votado que no. Tendrán sus razones», dijo.

Fuentes de la dirección han coincidido en que se trata de un «buen acuerdo» y sobre todo han destacado el «alivio» que supone retomar el funcionamiento de la planta de Treto para poder llegar a cumplir los compromisos con los clientes, que era una de las preocupaciones más urgentes. Precisamente, hay un pedido urgente con Rumania (para Ford  que tiene que salir y que era una de las principales preocupaciones de la empresa ante el alargamiento de la huelga.

La empresa ha valorado la actitud del comité en las últimas horas, buscando el acuerdo de los trabajadores para poder volver a la actividad, y ha destacado el «alto» porcentaje de empleados que han participado en el referéndum, teniendo en cuenta que han votado 661 y la fábrica tiene en torno a 750.

El preacuerdo supone iniciar la negociación del plan de reestructuración sobre la base de una reestructuración en 5 años y un máximo de 220 salidas de personas así como negociar la forma de articular las medidas de movilidad funcional interna para las personas trabajadoras que permanezcan en la empresa. Las condiciones económicas para los mencionados excedentes serán las establecidas en el acuerdo Stage.

Los salarios de las nuevas contrataciones se producirán en las condiciones del convenio colectivo sectorial aplicable con el compromiso de evitar la externalización de actividades.

Además, está el compromiso de las partes de analizar y establecer un proceso de unificación de las tablas salariales y modificación del sistema actual de prima de producción, acordando expresamente que dicho proceso no suponga una variación de los salarios.

Con el objetivo de facilitar un ajuste de costes se acuerda la congelación salarial para los años 2021 a 2025 ambos inclusive, si bien en caso de que el IPC acumulado de los años 2021 a 2023 fuera superior al 5%, se procederá a aplicar la diferencia entre el IPC real y el mencionado 5%. ii. Asimismo, en el supuesto de que el IPC acumulado de los años 2021 a 2024 fuera superior al 6%, se procederá a aplicar la correspondiente diferencia en el ejercicio.

Con los compromisos establecidos las partes se comprometen a posicionar la empresa como estratégica para el desarrollo industrial de Cantabria y obtener los apoyos correspondientes de las administraciones públicas que faciliten su desarrollo futuro.

El consejero de Industria, Javier López Marcano, ha calificado el acuerdo de SEG Automotivecomo una «extraodinaria noticia» para trabajadores y empresa, a quienes ha dado la enhorabuena, pero también para «toda Cantabria en general».

«Extraordinaria y anhelada noticia para los trabajadores, sus familiares y allegados, para la empresa, la cuenca del Asón, no solo para Treto», ya que «el efecto es comarcal y supracomarcal, para toda Cantabria en general», ha ensalzado.

A juicio del consejero, el tejido productivo de la región «sale reforzado y fortalecido» tras este «final feliz» con un acuerdo al que se ha llegado «en momentos complicados para todos».

Asimismo, ha destacado que para el Gobierno de Cantabria ha sido «un placer» haber podido ejercer de «mediador», después de que acudieran a las negociaciones de ayer el presidente y el vicepresidente, Miguel Ángel Revilla y Pablo Zuloaga, respectivamente, así como el propio Marcano, que se ha mostrado «dispuesto a repetir la experiencia» siempre que se demande su colaboración.

Según este último, al Ejecutivo le corresponde ahora «trabajar en el futuro inmediato, en los proyectos que tengan que ver con la innovación, el desarrollo tecnológico, la apertura de nuevos mercados y la penetración de los productos en todos los países del mercado global».