El absentismo genera pérdidas a las empresas cántabras por 650 millones de euros este año

En concreto, según ha presentado la Mutua Montañesa se estima que se han perdido este año 3.964.718 jornadas laborales perdidas este año (17,16 por empleado). Además, las previsiones apuntan a que los datos empeorarán en 2025 y subirán a 11.599 los trabajadores que faltan a su puesto por este motivo, con 4,2 millones de jornadas perdidas y un impacto que alcanzaría entonces los 694,5 millones de euros para los empresarios, según se desprende del último informe del Observatorio de Absentismo Laboral de Mutua Montañesa.

El director gerente de la mutua, Alberto Martínez Lebeña, y el presidente de CEOE-Cepyme Cantabria, Enrique Conde, han presentado este miércoles el estudio, que recoge los datos de enero a agosto y como novedad en esta edición incorpora la sección 'Faro' con proyecciones a futuro, en este caso del cierre de 2024 y del año 2025.

Los datos, que para el presidente de la patronal «dan pánico», se han presentado en el VIII encuentro del Observatorio del Absentismo Laboral CEOE CEPYME - Mutua Montañesa, con mesas redondas en las que ha reunido al sector empresarial y otras entidades implicadas como los sindicatos, el Servicio Cántabro de Salud (SCS), el Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICASST) y el Instituto Nacional Seguridad Social (INSS).

Los datos de enero a agosto reflejan que 10.809 trabajadores no fueron cada día al trabajo por bajas y se perdieron 2,6 millones de jornadas, generando un impacto de 432.662.874 euros. La mayor parte fue por enfermedad común (los casos que se tratan desde el Servicio Cántabro de Salud). En concreto, por cada día perdido derivado de accidente de trabajo (los que gestiona la mutua) se pierden 6,57 días por enfermedad común. Por patologías, los mayores incrementos se han producido en trastornos psicosociales (+14,34%) y en procesos musculo-esqueléticos (+5,75%).

Y por sectores, los más afectados por las bajas son, por este orden, los de recogida, tratamiento y eliminación de residuos; la industria de la alimentación; la construcción de edificios; fabricación de otros productos minerales no metálicos; metalurgia; almacenamiento y actividades anexas al transporte y fabricación de productos metálicos, excepto maquinaria y equipo.

Tanto la incidencia como la prevalencia de las bajas están muy por encima de las cifras de 2019, antes de la pandemia (+70,4% y +56,4%, respectivamente), y desde 2021 han venido creciendo a ritmos de entre un 10% y un 20% anual.

Cantabria es la comunidad con mayor prevalencia de incapacidad por accidentes de trabajo, con una tasa del 5,62 frente al 3,90 nacional, si bien se registra una caída del -4,79% respecto al mismo periodo de 2024. En cuanto a incidencia, ha caído un 7% con respecto a 2023 y Cantabria presenta una tasa del 3,03 cuando la media de España es de 2,85. La duración media de las bajas también ha caído en cuatro días, hasta los 62,78, si bien el 70% de ellas se concentran menos de un mes.

El presidente de CEOE-CEPYME ha alertado del problema «demoledor» que supone para el futuro de los empresarios el crecimiento «desmedido» del absentismo laboral, «duplicado en menos de cinco años y con tendencia a duplicarse en otros cinco».Además de a la economía, ha remarcado que también afecta a la salud y refleja que «el sistema está claro que no funciona tal como está concebido», pues «hay veces que los trabajadores se pasan cinco o seis meses sin saber ni siquiera ni qué patología tienen porque no se les atiende».

Mientras, desde UGT y CCOO han advertido que el absentismo no se debe abordar pensando en lo que «les cuesta a las empresas», porque «detrás de los números hay personas», sino en buscar soluciones para reducir las bajas, algo que pasa por la prevención de riesgos laborales y el cumplimiento de las normativas de seguridad.

En este sentido, patronal y sindicatos han coincidido en que debe organizarse una mesa de trabajo con todos los agentes implicados, también el Gobierno, al que han «echado en falta» en esta jornada.

«Tengo una decepción importante sobre este tema». «Nos estamos jugando el futuro de nuestras empresas y nuestra economía y en esto está quien quiere estar», ha sentenciado Conde.

En el mismo sentido, el secretario general de UGT, Mariano Carmona, ha dicho que «lo primero que tenemos que conseguir es sentarnos todos en una mesa, que de momento ni la Mutua ni la CEOE lo han conseguido»; y su homóloga de CCOO, Rosa Mantecón, ha llamado a «todos los agentes implicados en la resolución de este problema», donde cree que «hay que cambiar un poco el foco» porque «se está estigmatizando a muchos trabajadores y a quien hay que señalar es a quien puede poner solución al problema, en primer lugar al servicio público de salud».