
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Se había convertido en una tradición navideña que la primera cifra del paro del año fuese buena. En diciembre siempre se reducía el número de desempleados gracias, sobre todo, a la contrataciones temporales por las fiestas. Sin embargo, ya el año pasado se rompió esa tendencia y ahora se ha vuelto a repetir. El paro en Cantabria subió un 0,08% el mes pasado, igual que otras comunidades del norte como País Vasco, Navarra o La Rioja.
A pesar de todo, el balance del año es mejor de lo esperado en la región, con un 2,19% menos desempleados que en 2018, un comportamiento algo mejor que la media nacional y que la mayoría de comunidades.
Ahora mismo hay en la región 36.729 desempleados. Hay que remontarse hasta 2008 para encontrar una cantidad más baja. En aquel entonces, Cantabria cerró el año con 33.711. Después sufrió una subida paulatina hasta alcanzar su récord en 2013 (56.948) y una bajada los cinco años posteriores que culmina con los datos que acabamos de conocer.
La gran mayoría de los más de 36.000 parados cántabros buscan trabajo en el sector servicios, en concreto 27.283 a cierre de año, y a pesar de que en el último mes 335 encontraron un puesto en esta actividad.
La siguen por número de desempleados la construcción, con 3.034, tras sumar 273 nuevos demandantes en diciembre, y la industria, con 2.971, al incorporar 157 parados más.
La agricultura cántabra aglutina por su parte a 690 personas en búsqueda de empleo, 24 más que en noviembre, y el colectivo sin trabajo anterior está compuesto por 2.751, que son 89 menos que un mes antes.
Más de la mitad de las personas en paro en la región son mujeres, 20.144 frente a 16.588 hombres, y la gran mayoría tiene más de 25 años, en concreto 34.076, y de nuevo son más numerosas las cántabras (18.895) que los cántabros (15.181).
Sin embargo, entre los parados más jóvenes -menores de 25 años, y que suponen 2.653 en la Comunidad Autónoma- hay más hombres (1.407) que mujeres (1.246).
En cuanto a los extranjeros, a cierre de 2019 había en la región 3.727 en paro, que suponen 21 más en términos interanuales (un 0,57% de repunte respecto a 2018) y 19 menos que en noviembre (-0,51%).
Del total de foráneos que buscan trabajo en Cantabria la mayoría son de países de fuera de la Unión Europea (2.598) mientras que 1.129 proceden de estados miembro.
Por sectores, y al igual que los cántabros, el grueso de extranjeros busca trabajo en el sector servicios (2.421), seguido de la construcción (260), la agricultura (149) y la industria (147), mientras que 650 pertenecen al colectivo sin empleo anterior.
La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Ana Belén Álvarez, ha expresado la preocupación del Gobierno de Cantabria por los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) en marcha en varias empresas de la comunidad autónoma, aunque ha asegurado que, a cierre de 2019, «hay menos trabajadores afectados» que en diciembre del año anterior.
En concreto, ha detallado que en diciembre de 2019 había un total de 913 trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo, mientras que en el mismo mes del año anterior ascendían a 963, es decir, que hay medio centenar menos de afectados. Álvarez ha manifestado que en el Gobierno «nos preocupa» la situación pero principalmente por «la indefinición del rumbo que puede tomar el sector de la automoción», que es el que se está viendo actualmente afectado por esos expedientes, así como el del acero y las electrointensivas.
Aun así ha destacado la «evolución favorable» de desempleo en la región en el año 2019 y ha puesto de relieve que «hay que remontarse once años atrás, para encontrar un mejor dato absoluto de paro en el mismo mes de diciembre», concretamente en 2008, donde el número de personas desempleados se situó en 33.771. Además, ha ensalzado que «desde diciembre de 2015 el paro ha descendido en Cantabria en 12.733 personas, un 25,74%».
Asimismo, la titular de Empleo ha explicado que la afiliación media en Cantabria ha ascendido a 218.958 personas, lo que «se traduce en la creación de 3.830 empleos netos en los últimos doce meses».
De este modo, la consejera ha destacado que 2019 ha experimentado una «evolución favorable» según todos los indicadores, con la salvedad de la contratación indefinida, que ha bajado.
Por ello, Álvarez ha incidido en que desde su departamento se van a impulsar políticas enfocadas a favorecer la contratación indefinida, con empleo estable y de calidad y para ello se ha incrementado hasta los 3,7 millones de euros la partida presupuestaria destinada a este fin frente a los 2,2 millones del ejercicio anterior.
A su vez, Álvarez ha aprovechado para adelantar que el Servicio Cántabro de Empleo «publicará en este mismo mes de enero cuatro convocatorias que suman subvenciones por valor de 2,5 millones de euros».
Las reacciones de los sindicatos y partidos no han sido en absoluto positivas, ese a ese leve repunte del empleo. Desde estos sectores se insiste en el deterioro del mercado laboral y la precariedad de los empleos, mientras se reclama un cambio del modelo productivo o se culpaboliza directamente a las políticas del bipartito PSOE-PRC
Así el diputado regional del Partido Popular Lorenzo Vidal de la Peña ha pedido al presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla (PRC), que se deje de «politiqueos y mire a la cara la realidad económica de la comunidad» porque «el paro le sigue ganando terreno». «Industria, construcción y agricultura han destruido empleo en Cantabria el pasado mes de diciembre y eso quiere decir que si las cifras de desempleo no son peores es solo porque los contratos temporales de la campaña de Navidad salvan la cara y porque los datos nacionales son muy negativos», ha asegurado en una nota de prensa el diputado popular.
Para CCOO es urgente la creación de una estrategia que transforme el modelo productivo regional para conseguir un mercado de «trabajo estable y de calidad», y considera «insostenible» que el desempleo «baje a costa de una contratación extremadamente precaria».
En una nota de prensa, Comisiones Obreras subraya que Cantabria ha cerrado el año, «una vez más, con unos malos datos de paro», y que «ni siquiera las contrataciones ligadas al comercio y al sector turístico y hostelero, generadas por la campaña navideña, han conseguido impulsar el empleo».
Para el sindicato, los datos del desempleo «evidencian una realidad» que esta organización viene reclamando desde hace tiempo: la necesidad de elaborar una estrategia que transforme el modelo productivo de la región y que dé como resultado un mercado de trabajo «estable, digno y de calidad».
En el m ismo sentido, USO cree que los últimos datos del paro ponen de manifiesto el «progresivo deterioro» del mercado laboral de la comunidad. «Cantabria acaba el año 2019 exhausta y pidiendo la hora», ha señalado en nota de prensa USO, que añade que «el deterioro de la economía se hace cada vez más evidente».
Destaca además que diciembre ha sido un mes «rotundamente malo» y la campaña de Navidad «sólo ha servido para edulcorar un mercado de trabajo que se desinfla empujado por la crisis industrial y un sector servicios que ha tocado techo» en la región y que «no va a ser el salvavidas» de la economía como «se pretendía» desde la Administración regional.
La Unión General de Trabajadores (UGT) ha hecho hincapié en la alta tasa de temporalidad y ha destacado que 2019 deja en Cantabria un 93,7 % de contratos temporales, la tasa más alta de los últimos 18 años.
El secretario de Acción Sindical de UGT en Cantabria, Valentín Fernández, asegura en una nota de prensa que el incremento del desempleo en la región el pasado mes de diciembre «es el fiel reflejo de un año donde han vuelto a crecer la temporalidad y la precariedad de los empleos generados en un contexto de inestabilidad laboral, especialmente agravada por la situación de la industria».
«Sólo en el mes de diciembre un 94,5 % de los contratos de trabajo registrados en Cantabria fueron temporales, la tasa más alta desde que en el año 2002 el Ministerio de Empleo facilita este tipo de estadística», dice Fernández.
Según señala, estas «elevadas cifras» confirman que 2019 ha sido el año «con mayor temporalidad contractual en estos 18 últimos años».
La visión de la patronal cántabra también es muy pesimista . CEOE-Cepyme cree que las contrataciones en sectores como servicios o comercio por la campaña de Navidad «enmascaran parcialmente» los datos de empleo en la región, que la patronal tacha de «malos» y por los que muestra preocupación.
CEOE destaca que la mayor parte de las contrataciones al cierre del ejercicio corresponden a jóvenes sin empleo anterior por lo que, como ha señalado el presidente de la patronal, Enrique Conde, «los datos de empleo hoy en Cantabria deberían preocuparnos más de lo que el efecto de las contrataciones navideñas permite ver aún».
A esto une el «inminente impacto» de la crisis industrial sobre el empleo, lo que «preocupa» a la organización empresarial y a su líder, que considera «imprescindible» que empresas, sindicatos y administración hagan «un frente común» con medidas concretas.
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