El tráfico cae casi un 3% hasta mayo en el Puerto de Santander

De este modo, se sitúa como uno de los cinco puertos del Estado que decrecieron de enero a mayo, frente al incremento medio del 7,3% que registraron en conjunto los 46 puertos, que movieron 236,6 millones de toneladas, rozando los niveles que se registraban antes del estallido de la pandemia.

En concreto, la diferencia es de apenas 730.000 toneladas, lo que supone que el tráfico de este año está a un 0,3% de superar el máximo histórico alcanzado en 2019. En el Puerto de Santander, las mercancías registraron un comportamiento similar, con 2,6 millones de toneladas, un -2,8% menos que en el acumulado hasta mayo de 2021, frente al repunte del 6,8% en el total de puertos del Estado. En los cinco primeros meses del año, el movimiento de graneles sólidos creció un 0,23% respecto al mismo periodo del año anterior en el Puerto de Santander, hasta los 1,3 millones de toneladas; y el de graneles líquidos repuntó un 3,9%, con 116.125 toneladas. La mercancía general retrocedió un 6,7%, hasta 1,1 millones de toneladas.

Dentro de la mercancía general, la de contenedores en el Puerto de Santander se redujo un -7,48 por ciento, hasta las 156.818 toneladas de enero a mayo; y el de contenedores (TEUS) cayó un -9,8%, con 13.422.

También el tráfico ro-ro experimentó una bajada en el Puerto de Santander, concretamente del -7,9%, hasta las 944.048 toneladas. El tráfico de turismos, autobuses y camiones en régimen de mercancía registró hasta mayo 105.839 unidades, un -26% menos. Sin embargo, el Puerto de Santander disparó un 379% el número de pasajeros en régimen de transporte y de crucero hasta mayo, con 76.408, frente a la subida del 138,5% en el conjunto de Puertos del Estado.

En los Puertos del Estado, los graneles, tanto sólidos como líquidos, fueron los que más crecieron, un 14% y un 12,7% respectivamente. En el primer grupo, los principales productos fueron: cereales y sus harinas, que con 5,9 millones de toneladas crecieron un 53%, el carbón y coque de petróleo, con 6,9 millones (37%), y los 7,3 millones de minerales no metálicos (14%).

Entre los graneles líquidos destacaron las subidas del gas natural (72%), que superó los 9,5 millones de toneladas, la gasolina (33%), con 7 millones, y el petróleo crudo (16%), con 26,6 millones de toneladas.