Tycsa participa en Panamá en la obra del mayor puente atirantado del mundo

En cifras, el Grupo Celsa ha empleado 3.000 toneladas de acero en los trabajos, tanto para los tirantes de la estructura como para el cordón postensado de los viaductos de acceso y el puente principal.

Según explica la propia corporación a este periódico, la longitud total del equipamiento alcanza los 2.820 metros. El puente principal –el atirantado– tiene 1.050 metros con vano principal de 530, mientras que la altura de los pilones alcanza los 213 metros. Respecto al gálibo, esto es, la altura del tablero sobre el nivel del agua del canal, se sitúa en otros 75 metros. Más datos, el viaducto de acceso desde el este tiene 1.074 metros de longitud, mientras que por la parte occidental cuenta con 756 metros.

La compañía con complejo en el polígono industrial de Nueva Montaña pone en valor su participación en el proyecto, toda vez que el paso permitirá a los viajeros cruzar el Canal de Panamá, en la costa atlántica, con independencia del funcionamiento de las esclusas. Este cambio no es en absoluto baladí, pues hasta la fecha existía una carretera sobre las compartimientos que se cortaba cuando éstos se abrían para dejar libre acceso a los barcos.

El tercer puente sobre el Canal de Panamá se encuentra ubicado en la provincia de Colón, aproximadamente a tres kilómetros al norte de los complejos de esclusas de Gatún y Agua Clara. La infraestructura se convierte así en un ícono de entrada a la vía acuática por el sector atlántico, al ser la primera superestructura visible que antecede los dos complejos de esclusas del sector. No sólo eso, sino que como abunda el Grupo Celsa, está llamada a aportar un impulso notable al desarrollo económico de la zona oeste de la provincia de Colón.

Tycsa está especializada en fabricación de alambres y cordones de acero de alto límite elástico para la construcción con gran presencia internacional. En el caso de Puente Atlántico, el fin de los trabajos está previsto para diciembre.

El último acto público del Grupo Celsa en Cantabria tuvo lugar en abril, cuando el presidente autonómico, Miguel Ángel Revilla, visitó las instalaciones de Global Steel Wire. En aquel momento el jefe del Ejecutivo recordó el peso que tiene la organización en el tejido corporativo de la Comunidad. A saber, el mandatario sostuvo que la siderúrgica es la primera empresa industrial de la región, que genera más de 7.000 empleos entre directos, casi 1.500, e indirectos. Además, su producción supone el 6,1% del Producto Interior Bruto (PIB), así como más del 30% de la producción industrial total autonómica.

En cuanto al empleo indirecto, Revilla incidió en que GSW mueve todos los días unos 600 camiones, lo que permite que «muchísimos cántabros vivan gracias a esta empresa». En paralelo, resaltó el carácter familiar del Grupo Celsa, que todos los años organiza un acto en el Paraninfo de La Magdalena para premiar a los trabajadores que aportan ideas para mejorar la productividad de la compañía.

El Grupo reconoció, en su habitual reunión anual celebrada el pasado mes de febrero en La Magdalena, que 2017 había sido «un buen año» y confió en que en el actual el consumo de acero crezca un 2%. Además, recicla más de 100.000 toneladas de escorias al año.

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