Borrar
Sede central. La sede de la Caja en la Plaza Porticada antes de la peatonalización. Fotos: Miguel de las cuevas, Celedonio y Archivo
Los últimos pasos de Caja Cantabria

Los últimos pasos de Caja Cantabria

La entidad, como parte de Liberbank, se diluirá más en el nuevo banco que surja tras la fusión con Unicaja que será realidad este mismo año

Domingo, 10 de enero 2021, 07:39

Los tiempos cambian y las entidades bancarias tienen que apostar por un futuro que pasa por la dimensión para hacer frente a la competitividad del mercado financiero. En ese escenario, Caja Cantabria da sus últimos pasos tras más de cien años de existencia y con el horizonte cercano de la fusión entre Liberbank, del que forma parte, con Unicaja. La entidad cántabra, que ya tenía poco peso en el banco, quedará diluida en la nueva entidad que surja. Sin embargo, los cien años de historia que contemplan a la caja de ahorros son parte importante de la propia realidad de Cantabria que se ha beneficiado de su existencia y de forma muy importante a través de la obra social, uno de los objetivos fundacionales de la entidad.

Los primeros pasos de Caja Cantabria nos llevan a 1896 cuando Modesto Tapia Caballero, un industrial burgalés, a su fallecimiento dejó en testamento un legado de 45 000 pesetas, destinado a fines benéficos sin especificar. El gobernador civil de entonces, Francisco Rivas Moreno decide dedicar 35 000 pesetas del legado de Modesto Tapia a la constitución del capital fundacional del Monte de Piedad y Caja de Ahorros.

El primer consejo se formaría el 11 de febrero del mismo año, con la participación del Ayuntamiento de Santander, Liga de Contribuyentes, Cámara de Comercio, Obispado y Diputación Provincial. El 28 de abril de 1898, coincidiendo con el cese de Francisco Rivas, la reina regente sanciona los estatutos de la nueva caja, y consagra la figura de los gobernadores civiles como presidentes del consejo de administración de estas instituciones, hasta la reforma legal de 1977.

Tras nacer a partir de la herencia de Modesto Tapia, el Monte de Piedad Alfonso XIII y la Caja de Ahorros de Santander se constituye oficialmente el 3 de junio de 1898

El 3 de junio de 1898 se constituía oficialmente el Monte de Piedad de Alfonso XIII y Caja de Ahorros de Santander.

La Caja tuvo su primer local en el número 5 de la calle Pedrueca de Santander. A finales de 1902, el Consejo proyecta ampliar la sede de la entidad con la ayuda de un legado de 60 000 pesetas del primer marqués de Comillas, al que se añadiría otra cantidad igual ofrecida por su hijo, el segundo marqués, quien recomendó que el futuro edificio, situado en el campo de Tantín, tuviera estilo montañés, y se encargará al arquitecto catalán Luis Doménech, profesor de Gaudí. Aunque el proyecto del edificio ha desaparecido no hay duda sobre la autoría del mismo según recogen diferentes publicaciones, entre ellas El Diario Montañés. 30 de julio de 1907, portada): «Únicamente recordaremos que se encargaron los planos al arquitecto don Luis Doménech y los entregó al poco tiempo mereciendo grandes elogios».

Arriba: Visita del expresidente de EE UU Carter en el Centenario de la Caja. Abajo:
Imagen principal - Arriba: Visita del expresidente de EE UU Carter en el Centenario de la Caja. Abajo:
Imagen secundaria 1 - Arriba: Visita del expresidente de EE UU Carter en el Centenario de la Caja. Abajo:
Imagen secundaria 2 - Arriba: Visita del expresidente de EE UU Carter en el Centenario de la Caja. Abajo:

La primera piedra del edificio la coloca el rey Alfonso XIII el 31 de julio de 1905 y, dos años después, el 29 de julio de 1907, el propio monarca lo inaugura (hoy sede de la Obra Social de Caja Cantabria y lleva el nombre de 'Modesto Tapia').

En 1923 se celebra el XXV aniversario de la fundación de la entidad con la inauguración de una oficina en la calle Hernán Cortés.

Etapa de expansión

En agosto de 1947 se abre la primera sucursal en Torrelavega, y en 1948 se proyecta el edificio de la Plaza de Velarde de Santander, que se inaugura en 1953, año en el que la institución pasa a denominarse Caja de Ahorros de Santander. Esta etapa se caracteriza por la expansión por toda la provincia. En 1962 se alcanzan los primeros mil millones de pesetas de recursos ajenos.

En la década de 1980 pasa a denominarse Caja de Ahorros de Santander y Cantabria y, en esa misma época, se inaugura el edificio de la subcentral de Cazoña, para albergar los servicios de informática, organización y administración.

Las fusiones

Los cambios en el mercado financiero llevaron a Caja Cantabria a ser la 'novia' de cara posibles 'matrimonios'. Al final, cuajó la operación de enlace de varias cajas (con la de Asturias como protagonista principal) y surgió Liberbank. En 2015 la marca Caja Cantabria dejó de ser operativa, a pesar de que en la región se siga teniendo en mente, no solo por los clientes que han pasado al nuevo banco sino por la obra social que se sigue llevando a cabo, ahora a través de la Fundación.

En los últimos años, Liberbank fue objeto de deseo para muchas entidades bancarias, con OPA incluida por parte de Abanca. Sin embargo, ya a finales de 2020 empezó a fraguarse la fusión con Unicaja, que se ha escenificado de forma clara al comenzar 2021 y que este mismo año será realidad. El 'alma' financiera de la inicial Caja de Ahorros de Santander queda en el pasado.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes Los últimos pasos de Caja Cantabria