Glamour, pedrería y lentejuelas en el desfile 'disco' de Etam

Etam ha celebrado su espectáculo anual durante la Semana de la Moda de París. Para la decimotercera edición, la marca quiso mostrar el lado oculto de la industria, desde los secretos de fabricación hasta la efervescencia de estar detrás del escenario, en un importante enclave: al aire libre, alrededor de su buque insignia, ubicado en el número 16 de la rue Halévy, un lugar protegido catalogado como monumento histórico.

Transformada para la ocasión, la tienda mostró los preparativos y parte de la acción detrás del escenario desde las gradas a 400 invitados. Un guiño a esta vitrina de volúmenes espectaculares, revisada bajo la atenta mirada del arquitecto holandés Winy Maas en 2018, de la que también disfrutaron 800.000 espectadores a través del canal francés W9 y más de 130.000 en Etam.com e Instagram. El alcance global del evento en las redes sociales de la marca llegó a más de 9,3 millones de personas.

La colección, pensada y creada en torno a la fiesta, reveló siluetas bajo la influencia de un ambiente disco. Los estilistas de Etam se inspiraron en la efervescencia creativa de los ritmos embriagadores y la exuberancia de la época. Para la ocasión, escarbaron en los archivos de la marca para recuperar algunas piezas emblemáticas de las últimas décadas. 'Collector's Edition', una cápsula de edición limitada que transpone brillantemente la estética original de la marca de los años 70 a la década de los 90 y a la actualidad, ya está a la venta en la web de la firma y en sus tiendas.

El show empezó con el tema 'Fashion Party', entre la elegancia innata y la provocación asumida, el blanco y el negro chocan en un duelo de alta costura sensual. Materiales contrastantes, encajes y deshuesados visibles, siluetas estructuradas y realzadas con corsés. Un juego de gráficos donde las camisas blancas XXL se superponen sobre bustiers rediseñados, puntuados con toques de cuero y vinilo. Una redefinición de fronteras para celebrar la moda y sus infinitas posibilidades. Después llegó el turno de la parte más deportiva, con un torrente de siluetas con colores explosivos y líneas dinámicas. Inspiración de los 80, detalles holográficos en microfibra esculpida y tul transparente: los destellos de la pasarela ofrecen una doble interpretación explorando la intensidad de los colores.

La tercera parte del desfile fue la 'Garden Party': un símbolo de feminidad elevada y un elogio a la voluptuosidad. Aquí, el rosa se presenta en una paleta de tonos irresistibles. Con reminiscencias de un jardín de verano con inspiraciones poéticas, los materiales son aireados y están imbuidos de una sensualidad ligera. Para sublimar las curvas del cuerpo, el minimalismo de los detalles enfatiza volúmenes inéditos. Un verdadero paréntesis retro-paradisio, unas gafas mágicas para ver la vida de color rosa.

'Sunset Party' llegó con el espíritu de los setenta. Las siluetas dan lugar de honor al estilo hippie chic. Te dirige a Ibiza, fiestas imperdibles, puestas de sol extravagantes y looks vintage pronunciados. Drapeado elaborado, a veces anudado, a veces desatado, enfatizando y halagando la delicadeza de las curvas en un inquietante nivel de relajación. Estampados tie-dye, trenes coloridos, escotes pronunciados, modernos y sin esfuerzo. Una fiesta que se remató con el espíritu 'Disco Queen'. Una lluvia de pedrería y ráfagas de purpurina en cortes inesperados. Flecos exuberantes: cristales de fiesta por todas las prendas. Una celebración.