Detienen en directo a una youtuber cubana que estaba siendo entrevistada en 'Todo es mentira'

Las acusaciones seguían, insistiendo en la necesidad de auxilio que tiene el pueblo cubano. «No tengo miedo a hablar. Necesitamos ayuda. Aquí están matando a la gente, literalmente», aseguraba Dina relatando cómo a ella la habían citado para decirle que no se metiera en política, «era una amenaza disfrazada», exponía. Y seguía; «Ahora me han llamado para decirme que querían reunirse otra vez conmigo. Les dije que no y me contestaron que me iban a citar legalmente».

Visiblemente afectada, la joven seguía censurando la situación que viven sus compatriotas. «Están acabando con nosotros y no podemos contar con la prensa de este país porque todo lo que dicen es mentira», sostenía apelando a ver los vídeos publicados por ciudadanos anónimos que circulan por internet. «Nos han quitado internet, Cuba está desconectada», proseguía la muchacha evidenciando la crisis sanitaria y alimenticia que sufren. «¿Sabes quiénes sí tienen comida? Los dirigentes. Están todos gordos», añadía anunciando que hay muchas personas desaparecidas, «entre ellos 'influencers' y artistas amigos míos», desvelaba.

El cantante Yotuel, también cubano, se sumaba a la conexión justo en el momento en el que Dina comenzaba a hacer gestos aparatosos. «Están ahí fuera y tengo que salir», manifestaba inquieta. «La van a detener en directo», se escuchaba en el plató de Cuatro. Momentos angustiosos se vivían en directo, con la joven entrevistada abandonando su puesto. Una amiga se encargaba de coger la cámara y acercarla a la puerta del edificio para retransmitir lo que ocurría. «No te pongas en peligro, por favor», suplicaba la presentadora muy preocupada. Dina Stars regresaba ante la cámara para denunciar: «Me llevan detenida y hago responsable al Gobierno de mi país de cualquier cosa que me pueda pasar. Me tengo que ir», se despedía con gesto compungido. «Si nos está viendo alguien de Exteriores, espero que hagan algo», reclamaba Flich. «Sabíamos que esto iba a pasar, la tenían amenazada. Nos están tratando como delincuentes y no lo somos», reivindicaba una amiga de la arrestada llorando.