El Shakhtar destina 25 millones de un traspaso a las víctimas de guerra

El tártaro Rinat Akhmetov, magnate del Shakhtar, habitual en la Liga de Campeones, la máxima competición continental, sorprendió este lunes al comunicar que este pellizco económico irá destinado en concreto a los soldados, civiles heridos y a las familias afectadas por el conflicto bélico, en el marco del proyecto 'Heart of Azovstal' en beneficio de los defensores de Mariupol. El dispendio económico acometido por el célebre club londinense no solo mejora la calidad de la Premier League, la competición más rica del mundo, e inyecta liquidez en las debilitadas arcas del Shakhtar, sino que tendrá beneficiarios mucho más necesitados. Inestimable refuerzo para las tropas de Volodímir Zelenski, que el próximo febrero cumplirán ya un año de guerra contra la Rusia de Putin. 

«Gracias al ejército, a nuestro pueblo y al enorme apoyo de todo el mundo civilizado, hoy podemos hablar de fútbol ucraniano. Solo juntos derrotaremos al mal que ha llegado a nuestro hogar», proclamó el mandamás del club más representativo de la quinta ciudad más poblada del país, símbolo del este de Ucrania tan castigado por las armas. «Asigno 1.000 millones de UAH (25 millones de euros) para ayudar a nuestros soldados y defensores, así como a sus familias.

Se destinarán a diversas necesidades: desde tratamiento, asistencia psicológica y prótesis, hasta la realización de peticiones específicas. Para cumplir los principios de transparencia, se formará un equipo profesional e independiente que interactuará con los defensores de Azovstal –una de las empresas de laminación de acero más grandes de Ucrania–, sus familias, los servicios de patrocinio y los voluntarios», detalló este magnate de la minería, de 56 años. Se da la circunstancia de que en su día, Akhmetov perteneció al rusófilo Partido de las Regiones y financió las campañas de Víktor Yanukóvich, ucraniano de origen pero fiel aliado de Putin.

«Decidí lanzar el proyecto 'Heart of Azovstal' para ayudar a los defensores de Mariupol y a las familias de los soldados caídos, cuya hazaña no tiene parangón en la historia moderna. Gracias a ellos, a su sacrificio y a su valor para contener al enemigo en los primeros meses de la guerra, todos sentimos hoy la inevitabilidad de la victoria de Ucrania. ¡Estamos eternamente en deuda con nuestros guerreros!», sentenció el presidente del Shakhtar.

Akhmetov también confirmó un acuerdo con el Chelsea, que solo en los últimos seis meses ha gastado la barbaridad de 450 millones en fichajes, para disputar un amistoso en el Donbass Arena. Por culpa de la invasión rusa, el Shakhtar debió exiliarse de su estadio en Donetsk y disputar sus grandes partidos europeos en la vecina Polonia.