Nuevas huelgas en la sanidad pública británica

Los doctores «junior» se han movilizado en los últimos años en protestas sobre sus condiciones de trabajo y sus salarios. En marzo ya hicieron una huelga de tres jornadas. El sindicato que les representa, la Asociación Británica de Médicos (BMA), afirma que esta huelga de 96 horas persigue la restauración de los salarios de estos empleados del NHS, que han perdido el 30% de su paga real en la última década.

Se estima en 47.600 el número de médicos en formación que inician este martes la huelga, con su sindicato reclamando un aumento del 35%. La escala salarial de este segmento de profesionales de la sanidad va de los 23.000 euros mensuales, para quienes comienzan su aprendizaje clínico tras la universidad, a los 90.000 que puede ingresar un médico en su décimo año de formación.

Una diferencia con la huelga de marzo es la ausencia de servicios excluidos de la huelga, incluyendo los de emergencia. Líderes de la huelga han afirmado que, como en marzo, están dispuestos a coordinarse con los directivos del NHS para evitar riesgos a la vida de sus pacientes. El Gobierno dice que la demanda no es realista y pone el acento en el riesgo, fomentando un sentimiento negativo hacia los huelguistas.

Los servicios públicos han sido sacudidos por huelgas en los últimos meses en el Reino Unido. El de Sanidad vio al final de 2002 la primera de enfermeras en sus 75 años de historia. Tras una negociación no del todo satisfactoria que puso final a la huelga, los sindicatos han convocado una nueva movilización a partir del día 17. No cumplirán más que lo más básico de su contrato, y usarán el mayor número de descansos.