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El Lignum Crucis y la Virgen de Valmayor por las calles de la villa de Potes camino de la iglesia parroquial
Encuentro entre el Lignum Crucis y la Virgen de Valmayor

Encuentro entre el Lignum Crucis y la Virgen de Valmayor

Con motivo de la tradicional bajada anual de la Cruz a la villa lebaniega de Potes

Pedro Álvarez

Domingo, 4 de junio 2017, 16:14

La patrona de Potes, la Virgen de Valmayor, fue trasladada en andas por los devotos de la villa lebaniega, saliendo este domingo al encuentro con el Lignum Crucis, coincidiendo con la celebración del domingo de Pentecostés, en la bajada anual de la Reliquia que se viene realizando desde la Edad Media.

La Virgen de Valmayor salió desde la iglesia parroquial de Potes, trasladada en andas, poco después de las diez de la mañana, para unirse con el Lignum Crucis, que bajaba en procesión bajo palio desde el monasterio de Santo Toribio. La Cofradía de la Virgen de Valmayor ha querido que este año con ocasión de la celebración del Año Jubilar, la imagen de la Virgen acompañase a la Reliquia de la Cruz en el recorrido por la villa.

La Virgen de Valmayor, fue llevada en andas hasta Fonfría, a la salida de la villa, acompañada por devotos de la imagen, de Elías Hoyal y Javier Gómez, párroco y alcalde, respectivamente de la villa lebaniega. La Reliquia del Lignum Crucis, bajo palio, era llevada por el franciscano Padre Juan Manuel, al que acompañaban Javier Lombraña, presidente de la Cofradía de la Santísima Cruz, cofrades, y Oscar Casares, alcalde del Ayuntamiento de Camaleño, llegando al término municipal de Potes donde se produjo el encuentro entre la Virgen y la Cruz, y la entrega de la Cruz al párroco de la villa.

Seguidamente, la Virgen y la Cruz, fueron trasladadas por las principales calles del casco viejo, hasta llegar a la capilla de la residencia de la Tercera Edad "Félix de las Cuevas", donde antes de la celebración de la misa, la Cruz, fue llevada a las plantas y habitaciones para darla a besar a los ancianos más imposibilitados, viviéndose un momento muy emotivo.

Al concluir la ceremonia religiosa, el Lignum Crucis, bajo palio, y la Virgen de Valmayor, en andas, fueron trasladados a la iglesia parroquial de San Vicente Mártir, donde se celebró una misa solemne.

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