Secciones
Servicios
Destacamos
Manu Cortés
Sábado, 8 de enero 2022, 07:52
Con un diseño completamente nuevo y minimalista, el BMW iX es el primer representante de una generación pionera de coches preparados para redefinir la experiencia de conducción, la sensación de espacio interior y la relación entre el vehículo y sus pasajeros. El BMW iX se ... aprovecha de las últimas innovaciones en electrificación, conducción autónoma y conectividad para ofrecer una nueva experiencia de movilidad. El nuevo BMW IX dispone también de la quinta generación de la tecnología de motorización eDrive, que comprende los dos motores eléctricos, la electrónica de potencia, la tecnología de carga, la batería de alta tensión y la tracción a las cuatro ruedas.
La unidad de potencia eléctrica desarrolla hasta 386 kW (523 caballos) que permiten impulsar el BMW iX de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos. Al mismo tiempo, registra una cifra de consumo de energía eléctrica excepcionalmente baja para su segmento, inferior a 21 kWh cada 100 kilómetros. Una batería de alto voltaje de última generación, con una capacidad de más de 100 kWh, permite disponer de una autonomía de más de 600 kilómetros. Esta versión con la denominación X Drive 50, tiene un precio de 104.150 euros. La versión X Drive 40 es la de acceso a la gama IX por 87.150 euros y cuenta con un propulsor eléctrico de 240 kWh (326 caballos de potencia), con el que se obtienen hasta 426 kilómetros de autonomía.
La nueva tecnología de carga del BMW iX permite una carga rápida en «supercargadores» de corriente continua de hasta 200 kW que, por desgracia, en nuestro país brillan por su ausencia. Si se puede acceder a uno de estos cargadores de alta potencia es posible cargar la batería del 10 al 80 por ciento de su capacidad total en menos de 40 minutos. Además, en sólo diez minutos se puede introducir suficiente energía en la batería para aumentar la autonomía del coche en más de 120 kilómetros. Para cargar la batería de alta tensión de 0 a 100% mediante un cargador tipo Wallbox en un garaje particular con 11 kW de potencia contratada, se precisan entre once y doce horas.
La energía y la autonomía del nuevo BMW iX también se benefician de soluciones innovadoras en la ligereza de su diseño y la aerodinámica. La estructura de la carrocería, con un marco de aluminio y un innovador habitáculo de carbono, consigue una rigidez torsional extremadamente alta, lo que a su vez mejora la agilidad y maximiza la protección de los ocupantes, al tiempo que reduce el peso de la carrocería. Aprovechando al máximo las ventajas del sistema de propulsión totalmente eléctrico y aplicando innovaciones en el frontal del coche, los bajos, las ruedas y la parte trasera, el BMW iX presenta una aerodinámica excepcional en coches de su porte y envergadura de 0,25 CX, que tiene un efecto muy positivo tanto en las prestaciones como en la autonomía.
El nuevo conjunto de tecnologías que debutan en el BMW iX proporcionan la base para un progreso significativo en las áreas de conducción autónoma y servicios digitales. Por ejemplo, el nivel de computación se ha desarrollado para que pueda procesar un volumen de datos 20 veces mayor que en sistemas precedentes. Como resultado, se puede procesar alrededor del doble de datos recogidos por los sensores del vehículo de lo que era posible hasta ahora. Compatible con la tecnología 5G, el BMW IX dispone de nuevas funciones de conducción y aparcamiento automatizados.
El BMW iX es comparable con su «hermano» BMW X5 en longitud y anchura (4,95 m por 1,97 metros). Las líneas nítidas y los contornos casi rectangulares alrededor de los pasos de rueda contribuyen a ofrecer un imponente diseño de la carrocería. En el frontal, la gran parrilla de «doble riñón» actúa como panel «inteligente»: dado que el sistema de propulsión eléctrico sólo requiere una pequeña cantidad de aire para su refrigeración, la parrilla se encuentra cegada. La tecnología de la cámara, las funciones de radar y otros sensores se integran en la parrilla tras una superficie transparente.
Los aspectos más destacados del diseño exterior del BMW iX también incluyen los faros más estrechos jamás vistos en un BMW, los tiradores de las puertas enrasados (que se accionan con pulsar un botón), las ventanas laterales sin marco, el portón trasero (que no tiene juntas de separación y se extiende por toda la parte posterior), los también extremadamente estrechos pilotos traseros, la boca de llenado para el líquido del limpiaparabrisas permanece oculta bajo el logotipo de BMW en el capó y la cámara de visión trasera se ha integrado en el logotipo de BMW del portón trasero.
Una gran habitabilidad, una combinación de materiales de alta calidad, asientos de nuevo desarrollo con reposacabezas integrados y un techo panorámico de cristal excepcionalmente grande convierten el habitáculo del BMW iX en un «salón de estar de lujo». En el diseño del puesto de conducción sobresale la ausencia de túnel central, lo que permite ofrecer mayor sensación de amplitud, con un espacio superior para las piernas tanto en la parte delantera como en la trasera, suficiente espacio para guardar objetos y una consola central. Las pantallas y controles se han reducido a lo esencial, permitiendo que su uso sea más intuitivo en lugar de parecer demasiado complejo.
El diseño tecnológico del interior puede apreciarse en una serie de características, incluidos altavoces integrados fuera de la vista, salidas de ventilación integradas, superficies calefactadas y el discreto encastre del sistema Head-Up Display de visión ampliada tras la instrumentación, por lo que es casi invisible. La consola central cuenta con un nuevo e innovador mando giratorio para la selección de marchas, controlador táctil y una superficie de control iluminada con efecto de vidrio, dividida por barras táctiles y por controles, también táctiles, mediante los que se pueden cambiar los parámetros del vehículo. La gran pantalla curva del tablero de mandos abarca una agrupación de pantallas totalmente digitales, una de ellas de información con un tamaño de 12,3 pulgadas y otra de control de 14,9 pulgadas con una superficie de cristal de una sola pieza y sin marco.
El nuevo BMW iX es el primer vehículo de la marca alemana producido en serie con un volante hexagonal. Su contorno, inspirado en la competición, mejora el acceso y le ofrece al conductor una mejor visión de la información que aparece en la pantalla. Opcionalmente, el IX puede disponer de un gran techo panorámico de cristal con sombreado electrocrómatico disponible como opción. Se trata de la mayor superficie de vidrio jamás instalada en un modelo de BMW y cuenta con un diseño de una sola pieza y abarca todo el interior sin ningún refuerzo transversal.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.