Cómo ahorrar combustible te puede ayudar a evitar multas

Una conducción eficiente puede reducir el consumo de combustible hasta en un 25% y disminuir en más de 50% las emisiones de CO₂. Además, muchas de las malas prácticas al volante que aumentan el gasto de carburante también pueden derivar en multas evitables. Desde Pyramid Consulting, nos explican cómo pequeños cambios en la forma de conducir pueden beneficiar tanto a tu bolsillo como a la seguridad vial.

Por ejemplo, y en primer lugar, una de las principales causas del alto consumo de combustible es la conducción agresiva. Acelerar y frenar bruscamente aumenta hasta un 30% el gasto de carburante, además de desgastar los frenos y los neumáticos. Así que se debe mantener una velocidad constante y usa marchas largas cuando sea posible, además de anticiparse a la carretera para evitar frenazos innecesarios.

Circular a altas velocidades no solo incrementa el consumo de combustible, sino que también eleva el riesgo de multas. Cada 10 km/h adicionales pueden aumentar el consumo de gasolina o diésel en un 10%. Circular a 120 km/h en lugar de 100 km/h puede suponer un aumento del 20% en el consumo de combustible. Y las multas por exceso de velocidad pueden oscilar entre los 100 y los 600 euros, con la posibilidad de pérdida de puntos.

El aire acondicionado puede aumentar el consumo de combustible hasta en un 15% en trayectos urbanos. Por otro lado, llevar las ventanillas abiertas a altas velocidades genera resistencia aerodinámica, aumentando el gasto de carburante. Así, usa el aire acondicionado solo cuando sea necesario. A bajas velocidades, es preferible bajar las ventanillas; en carretera, mejor mantenerlas cerradas.

Unos neumáticos con la presión incorrecta pueden incrementar el consumo de combustible hasta en un 5% y afectar la estabilidad del vehículo, lo que podría derivar en sanciones si se considera un riesgo para la seguridad vial. En este caso, circular con neumáticos en mal estado puede acarrear multas de hasta 200 euros por neumático.

También aprovechar la retención del motor al reducir marchas en lugar de frenar continuamente permite ahorrar combustible y alarga la vida útil de los frenos. Además, evita sanciones en descensos prolongados donde el uso excesivo del freno puede generar sobrecalentamiento y pérdida de eficacia.

Asimismo, cuanto más peso lleve el coche, más combustible consumirá. Llevar el maletero cargado sin necesidad puede aumentar el consumo en hasta un 6%. Consejo, revisa periódicamente el coche y retira objetos innecesarios, y conduce con inteligencia y ahorra sin darte cuenta

Aplicar todos estos hábitos no solo te permitirá ahorrar hasta 500 euros al año en combustible, sino que también reducirá el desgaste de tu vehículo y disminuirá el riesgo de multas. Además, conducir de manera eficiente contribuye a la sostenibilidad, ayudando a reducir las emisiones contaminantes.

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