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LUIS CANDELA
Martes, 26 de enero 2016, 10:29
La Vega Baja concentra todas las muertes violentas que se investigan en este 2016 en la provincia de Alicante. La última se produjo ayer en la Dehesa de Campoamor, en Orihuela, donde un hombre murió acuchillado en su casa a manos de tres encapuchados. Se ... trata de un ciudadano italiano, de 49 años, que fue encontrado sin vida tras acudir los servicios de emergencia a la vivienda ubicada en la calle Vicente Blasco Ibáñez. Agentes de la Guardia Civil se presentaron en el domicilio tras un aviso al teléfono de emergencias y encontraron el cadáver en el suelo de una de las estancias y a una mujer maniatada, en otra.
El cuerpo yacía sobre un charco de sangre, por lo que cualquier intento de reanimación resultó inútil. Pese a que por el momento no se descartan hipótesis, los indicios apuntan a que se trata de una muerte relacionada con un posible ajuste de cuentas.
Los hechos se produjeron en torno a las dos de la madrugada y en el lugar del crimen se encontraba también la que podría ser la pareja del asesinado. Cuando los servicios de emergencia y los funcionarios policiales llegaron alertados por una llamada recibida al teléfono 112, encontraron a la chica, de nacionalidad rumana, maniatada con cinta adhesiva por los autores del homicidio. Los asaltantes irrumpieron en mitad de la noche y atacaron a la víctima, al tiempo que inmovilizaban a la mujer.
Los primeros compases de la investigación apuntan a que los encapuchados saltaron la valla que da acceso al bloque de viviendas para colarse en la casa de la víctima, a la que accedieron a través de una de las ventanas. El edificio donde ocurrió el suceso se encuentra en una zona de viviendas con vistas al mar, muy cercana a la playa de la Caleta de la Glea. Según ha podido saber este diario, los investigadores tratan de averiguar si los asaltantes podrían estar al acecho del fallecido por asuntos turbios relacionados con el tráfico de drogas.
Al parecer, los agresores son también de nacionalidad italiana y podrían conocer a la víctima, pues fueron directos al domicilio en el que se encontraba. Los agentes tratan de determinar si el acuchillado debía dinero o algún alijo a los sospechosos del crimen. La víctima estaba completamente integrada en la zona, pues contaba con más de un negocio cerca de donde residía.
Oleada de crímenes de sangre
Las primeras pesquisas las llevaron a cabo agentes de la Policía Judicial de Pilar de la Horadada, a quienes se han sumado miembros del Grupo de Homicidios de la Comandancia de Ia Guardia Civil de Alicante. Desde que se tuvo conocimiento del óbito, la madrugada del pasado lunes y durante el resto del día los investigadores rastrearon el domicilio y sus inmediaciones en busca de pruebas que les permitan dar con los autores de esta nueva muerte violenta.
El cadáver fue trasladado hasta el Instituto de Medicina Legal para practicarle la autopsia, aunque según ha trascendido, las heridas evidencian una muerte por arma blanca. La provincia de Alicante soporta desde el pasado 2015 una oleada de crímenes de sangre que parece prolongarse durante este año. Por el momento, se ha registrado un posible homicidio en la ciudad de Torrevieja y otro también en Orihuela Costa. En el primero de los casos, un hombre de 45 años está acusado de matar a otro de 65 años. (Más información)
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