Sánchez insiste antes de verse con Iglesias: «El acuerdo con C's es firme»

No habrá cambio de estrategia. Pedro Sánchez tiene previsto reunirse esta semana con Pablo Iglesias en solitario pero no alberga intención de desentenderse del acuerdo programático sellado con Ciudadanos para su complicada investidura. "Es un acuerdo firme y es un acuerdo abierto al resto de fuerzas políticas y, cuando me reúna con el señor Iglesias lo que le diré es que tenemos que acabar con este bloqueo institucional que está perjudicando a los millones de españoles que más han sufrido por la crisis", ha dicho en una rueda de prensa en Canarias, junto al presidente de la comunidad, Fernando Clavijo.

La cita con el líder de Podemos no tiene aún fecha. Hace cinco días, ambos dirigentes políticos mantuvieron una breve conversación telefónica en la que acordaron verse antes de que pase la Semana Santa, pero Sánchez estará en Canarias lunes y martes y, en principio, iba a tomarse un descanso a partir del jueves. Eso dejaría prácticamente como única opción el miércoles. Sin embargo, el líder socialista ha admitido que no hay nada cerrado.

Sánchez e Iglesias no se ven desde el pasado 5 de febrero, cuando el secretario general de Podemos comunicó al socialista que no se sentaría a negociar nada si el PSOE no renunciaba previamente a hablar con Ciudadanos. Diez días después, cambió de criterio y aceptó, gracias a la mediación de Alberto Garzón, que un equipo negociador liderado por Iñigo Errejón se reuniera con el socialista, el de IU y el de Compromís -que ya habían celebrado varios encuentros- para hablar de propuestas y no de la composición del Gobierno, como siempre fue su pretensión. Pero a las 48 horas, Podemos se levantó de la mesa, indignado por el pacto entre Sánchez y Rivera.

El apretón de manos entre las dos formaciones de centro evidenció que lo que pretendían los socialistas era una simple abstención de Podemos. Aspiraba a lograr además del sí de C's el de IU, Compromís, CC y PNV para alcanzar 143 escaños frente a los 142 que sumarían los 'noes' de PP, Bildu, ERC y Convergerncia. Pero con el descuelgue del partido de Iglesias se produjo también el de las otras dos fuerzas de la izquierda. Y Sánchez no obtuvo la confianza de la cámara para ser presidente.

Ahora, el PSOE ha logrado volver a sentarse con Compromís, IU y el PNV (lo hizo la semana pasada), pero Pedro Sánchez ha sido hoy claro y, de paso, ha disipado cualquier temor que pudiera existir en Ciudadanos sobre sus intenciones. "No me he movido y voy a ser coherente hasta el final", ha dicho. Su tesis sigue siendo que en el Congreso no hay mayoría de izquierdas ni mayoría de derechas pero que sí existe una "mayoría de cambio", e insiste en que, de las 200 medidas pactadas con Ciudadanos, 140 son compartidas por más de doscientos diputados.

Su mensaje a Iglesias, pues, es claro: o elige el que, según el PSOE, es el único camino posible para cambiar las políticas del PP o habrá una nueva convocatoria de elecciones.