Más de cuatro mil cántabros se suman en Madrid al clamor en defensa del mundo rural

Un «toque de atención» al Gobierno presidido por el socialista Pedro Sánchez que en diferentes enclaves de la Comunidad arrancó de madrugada, con más de 100 de autobuses regionales recogiendo a los manifestantes rumbo a la urbe madrileña. La pretensión, dejar claro el agotamiento del campo español y, por extensión, del cántabro.

Porque en muchos negocios las cuentas no salen. Bien lo saben los ganaderos o los pescadores, a los que los incrementos de costes fijos han alejado igualmente de la viabilidad, con precios como el de la venta de leche en origen que no cubren siquiera la inversión para producirla. O los cazadores, contrarios a la 'Ley de bienestar animal' y las restricciones a las prácticas tradicionales. O el malestar por la especial protección que la ministra Teresa Ribera concede al lobo frente a los daños que ocasiona en las estabulaciones...

Bajo el lema '20M Rural. Juntos por el campo', la convocatoria ha resultado un éxito, un peregrinar desde todos los puntos de la geografía nacional que desembocó en las principales arterias madrileñas a bordo de tractores, carretas, burros o a caballo. Evidentemente, también a pie, con una gran marea naranja defensora de la actividad cinegética.

Desde el punto de vista autonómico, satisfacción. Jacobo Alonso, director general de AgroCantabria, opinaba que «esto va a ser un antes y un después. Este sector siempre se ha caracterizado por su humildad y valores. Hoy ha demostrado que los sigue teniendo. Ha habido una unidad tremenda. Impresionante la cantidad de gente que ha venido. Familias enteras. Han sido más de seis kilómetros de manifestación. No creo que haya habido nada parecido en el sector en Europa a lo de hoy aquí».

En la misma línea, Gaspar Anabitarte, secretario general del sindicato ganadero UGAM-COAG. «Ha sido un éxito de público. Esta vez sí que se ha vaciado la 'España vaciada' pero porque estaban todos en Madrid. Estamos muy satisfechos. El objetivo fundamental era que el Gobierno se piense dos veces las decisiones que está tomando y dialogue con la gente del medio rural, que muchas veces tenemos muchas cosas que decir, así como opiniones que en ocasiones no tienen que coincidir con las de las ciudades. Del consenso y el acuerdo es como nace la buena política», arranca.

¿Espera el portavoz regional de UGAM una reacción de la Administración central? «No tenemos la menor duda. Sería un suicidio político no tomar nota. Vamos a ver si hablamos mucho más de lo que lo estamos haciendo. Desde las ciudades se hacen muchas políticas y se habla poco con la gente que vivimos en el campo», agrega.

Desde Asaja Cantabria, su secretario general, Raúl Guillarón, resaltó que «se ha respirado un ambiente de verdadera unión entre todos los sectores que comprenden este mundo rural. Desde dentro hemos podido asistir al gran apoyo que nos ha dado la gente de Madrid a nuestro paso con nuestras reivindicaciones, en las cuales pedimos sobre todo respeto y que nos dejen realizar nuestra actividad principalmente; que apliquen la ley de la cadena y nos paguen por nuestros productos un precio digno que nos permita vivir; que saquen el lobo de la Ley ya que su sobreprotección y el nulo control que realizan sobre él nos lleva a la ruina a los ganaderos».

Como complemento, el presidente de la Federación Cántabra de Caza, Ignacio Valle, que sostuvo que «ha salido de diez». «Ha ido muchísima gente. La afluencia ha desbordado todas las previsiones. El comportamiento de la gente ha sido ejemplar. Sin ningún incidente ni altercado. Ha sido un día de 'fiesta' y defensa del campo».