Los expertos piden exhumar 25.000 víctimas de la Guerra Civil y la dictadura

Según informa el Ministerio de Justicia en una nota, el estudio, que ha sido redactado por un equipo de once expertos coordinados por el médico forense Francisco Etxeberria para la Dirección General para la Memoria Histórica, ha desencadenado un plan para que las exhumaciones se lideren desde las administraciones públicas y puedan ejecutarse en un plazo temporal de una legislatura y media.

«Urge la asunción de un compromiso activo por parte de las autoridades en la investigación de la suerte y el paradero de personas desaparecidas durante la Guerra Civil y la dictadura, así como en la recuperación de los cuerpos», se señala en el documento.

Con los datos con los que se cuenta hasta el momento los expertos estiman que con una intervención estatal se podrían recuperar unos 20.000 a 25.000 individuos y de ellos quizás sea posible identificar entre 5.000 y 7.000 personas.

Entre 2000 y 2018 se exhumaron 740 fosas comunes en diferentes puntos del territorio nacional y se recuperaron más de 9.000 cadáveres, gracias al impulso de las asociaciones de memoria histórica, apunta el estudio. Los cadáveres recuperados son en su mayoría de víctimas civiles enterradas en cunetas, descampados, montes, cementerios (intramuros y extramuros), abandonadas en el terreno de los frentes de guerra o muertas en custodia.

Según el informe, los análisis encaminados a establecer la identificación de estos restos óseos y esclarecer las circunstancias de la muerte, realizados con posterioridad, se han realizado «de forma desigual», y es necesaria una coordinación nacional de las diferentes iniciativas de identificación genética de víctimas llevadas a cabo por los distintos territorios.

Todo ello implicaría desarrollar una red de laboratorios de genética forense de la memoria histórica y una base de datos nacional de ADN, en la que también participen las comunidades autónomas, para disponer de los perfiles biológicos de víctimas y familiares.

También supondría -según las recomendaciones de los expertos- realizar un censo de víctimas para unificar los datos de los que disponen actualmente las diferentes comunidades autónomas y poner en marcha un proyecto de investigación que conduzca a un registro detallado sobre la localización de las fosas comunes en todo el territorio nacional. Se podría así elaborar un nuevo mapa de fosas que supere el desfase actualmente existente y posibilitar realizar búsquedas avanzadas a través de Internet.

Además, los expertos piden al Estado impulsar la creación de un archivo unificado de testimonios orales de la Guerra Civil y la dictadura de Francisco Franco para que haga las veces de «fuente histórica» de la memoria de sus víctimas, para lo cual proponen un protocolo de actuación.

El Ministerio de Justicia asegura que esta dando «los primeros pasos» para abordar las recomendaciones de los expertos, tal y como se expuso en la reunión sectorial de memoria histórica celebrada la pasada semana, mientras que el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses ha comenzado los trabajos preliminares para coordinar la base de datos nacional de ADN.