Llop acusa al PP de no renovar el Poder Judicial para tapar Kitchen

En un cruce de mensajes entre ambos registrado entre ambos registrado entre febrero de 2019 y enero de 2020, Martínez, número dos del ministro del Interior Jorge Fernández Díaz desde 2013 a 2017, solicita a Navarro información sobre las investigaciones judiciales de la 'operación Kitchen'; el supuesto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas con medios policiales que se habría orquestado desde Interior para tapar la contabilidad B del PP.

La Fiscalía Anticorrupción pide para Martínez 15 años de prisión por malversación, encubrimiento y delitos contra la intimidad. Es la misma pena que solicita para Fernández Díaz y para el exdirector adjunto operativo de la Policía, Eugenio Pino.

En sus whatsapps Martínez llama «cabrón» a Fernández Díaz y añade sobre su declarada religiosidad: «Va a tener que ir muchas veces al confesionario». A medida que avanzaban las pesquisas de Kitchen, los mensajes del exsecretario de Estado a Navarro evidencian el creciente nerviosismo del primero. «Querido José, hoy vuelven a llamarme periodistas para decirme con seguridad que después del 21/05 me llamarán a declarar. Ya siento ser tan pesadísimo pero vivo esto con bastante angustia y muy poca ayuda, salvo la tuya y de algún otro. Por favor, no olvides el tema para que pueda estar preparado anímicamente además de jurídicamente. Disculpa la lata y un gran abrazo«, envía Martínez. E insiste en otra ocasión: «Tengo muy poca ayuda, salvo la tuya».

A medida que avanzaban las pesquisas de 'Kitchen', los mensajes del exsecretario de Estado a Navarro evidencian su creciente nerviosismo. En uno de ellos señala: «Querido José, hoy vuelven a llamarme periodistas para decirme con seguridad que después del 21/05 me llamarán a declarar. Ya siento ser tan pesadísimo pero vivo esto con bastante angustia y muy poca ayuda, salvo la tuya y de algún otro».

Pese a la evidencia de la relación entre Martínez y Navarro, la Fiscalía no aprecia ningún indicio contra el presidente de la Audiencia Nacional, quien en sus respuestas por Whatsapp no ofreció información alguna sobre la investigación a su interlocutor.

La ministra de Justicia no opina igual que el Ministerio Público. Según manifestó este viernes Pilar Llop en La Palma, se trata de «conversaciones de un presidente de la Audiencia Nacional, nada más y nada menos, y un cargo del PP imputado, ya acusado, en un procedimiento penal por unos hechos muy graves». «Me lleva a pensar que el PP tiene un interés evidente en no renovar el CGPJ», añadió la titular de Justicia. Navarro fue reelegido como presidente de la Audiencia Nacional en julio de 2019 por unanimidad, cuando el mandato del poder judicial llevaba ya seis meses caducado.

Las declaraciones de Llop coinciden en buena parte con las de la secretaria general de Podemos y ministra de Asuntos Sociales. Ione Belarra solicitó la dimisión de Navarro y apuntó también al Poder Judicial. «Mientras estaban intercambiando esos mensajes (Martínez y Navarro), el presidente de la Audiencia Nacional fue renovado por el Consejo General del Poder Judicial con el mandato caducado».

Izquierda Unida y en Comú Podem, dos de los socios de Unidas Podemos, ya han anunciado querellas contra el presidente de la Audiencia Nacional por un presunto delito de revelación de secretos. «El compadreo del PP, sus corruptos y la cúpula del Poder Judicial es un escándalo», justificó Jaume Asens, presidente del Grupo Parlamentario de Unidas Podemos. «Ahora sabemos -añadió- que el presidente de la Audiencia Nacional estaba ayudando a un investigado por corrupción del PP, que era ni más ni menos que el exnúmero dos de Interior».

La de los socios de Unidas Podemos no es la única querella anunciada contra el presidente de la Audiencia Nacional. Según informó la cadena Ser, hay una segunda que presentará el chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, quien fue captado por los organizadores de Kitchen para espiar al extesorero del PP y sustraerle el material comprometedor para la formación conservadora. La defensa de Ríos, quien se enfrenta a otros 8 años de cárcel, considera que Navarro «favoreció a su amigo protegido».

Las querellas se deberán presentar ante el Tribunal Supremo, dada la condición de aforado del juez Navarro.