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«No comparto ni voy a alentar jamás una deriva militarista que nos aboque a una nueva carrera armamentística». Pedro Sánchez se desmarcó este martes, durante su intervención en la IX Conferencia de Embajadores de España –a la que asistieron los 130 representantes diplomáticos que ... España tiene acreditados en el mundo– de la exigencia que vienen formulando con insistencia el presidente electo de Estados Unidos, DonaldTrump, que tomará posesión del cargo por segunda vez el 20 de enero, para que sus aliados aumenten el gasto militar.
El magnate republicano exigirá a los socios de la OTANelevar el porcentaje del PIBdestinado a Defensa hasta el 5%, cuando España –gastos extraordinarios a parte– se encuentra a la cola de los aliados con un 1,28%. Cuando Madrid acogió en junio de 2022 la conferencia de la Alianza Atlántica, se comprometió a subir este gasto al 2% en los próximos años, pero ahora, en un contexto internacional belicista y con un Trump que acusa a la Unión Europea de «no pagar» por su seguridad en el mundo, ese listón amenaza con elevarse.
Sánchez, sin embargo, se resiste por ahora, sobre todo después de prorrogar los Presupuestos de 2023, que deberían haber contenido un aumento de la partida militar y encarar los de 2025 con las dudas sobre si logrará aprobarlos. «En ningún manual está escrito que la paz y la seguridad se conquisten reforzando arsenales», replicó el presidente del Gobierno en su discurso ante los embajadores.
Eso sí, el jefe del Ejecutivo reafirmó su compromiso con Ucrania y con laOTAN y se mostró consciente de la «necesidad» de fortalecer el sector de la defensa europeo para no depender de terceros países. También hizo hincapié en las «carencias» que Bruselas tiene en el ámbito de la ciberseguridad.
La partida presupuestaria que España destina a Defensa roza los 11.000 millones de euros anuales, aunque el gasto total, contando las partidas extraordinarias, alcanzó los 15.958 millones de euros en 2024, una cantidad superior a los 14.597 destinados el año pasado y que se volverá a incrementar, salvo giró de guion, en 2025.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, alega que España es uno de los aliados de la OTAN que más contribuyen a las misiones internacionales para tratar de contrarrestar las críticas por ser los menos contribuyentes al presupuesto de la organización. Actualmente, hay tropas españolas desplegadas bajo bandera de la Alianza Atlántica en Bulgaria, Rumanía,Turquía, Letonia o Eslovaquia, en misiones como la operación 'Persistent Effort: Policía Aérea en el Báltico'. Su gasto, sumado al de otras operaciones conjuntas con la UEo la ONU se eleva a más de 1.200 millones de euros, como detalló la propia Robles el pasado noviembre en el Congreso.
En el otro lado de la balanza, Moncloa tiene que hacer frente a las críticas de sus socios como Sumar, Podemos o Bildu, que exigen destinar este gasto a partidas como Sanidad o Cultura.
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