Exconcejala en Santoña y gran impulsora de los festejos del municipio

Su figura siempre estará vinculada al Ayuntamiento de Santoña donde trabajó como funcionaria casi cuarenta años. Nanda sacó la plaza de auxiliar administrativo y entró a trabajar al Consistorio en abril de 1981, con apenas 23 años. Sus compañeros recuerdan que estuvo inicialmente en el departamento de Intervención y que pronto pasó a ocupar la secretaría de la Concejalía de Festejos y Turismo, un puesto que le vino como anillo al dedo, ya que supo como nadie tratar con las peñas, asociaciones y colectivos para guiarlas y ayudarlas a la hora de organizar los múltiples festejos locales.

Al despacho de Nanda acudían los murguistas y agrupaciones que querían formar parte de los primeros carnavales de la villa. Las peñistas y los carrocistas que se involucraban en las fiestas de la Virgen del Puerto. O los grupos de música que querían actuar en algún evento local. Su puerta siempre estaba puerta y ella dispuesta a echar una mano en los a veces farragosos trámites para los vecinos de a pie.

Junto a varias amigas creó la Asociación Barcos a Pique de la que ella fue la presidenta. Al llegar agosto celebraban una gala anual para reconocer con el premio 'Tripulante de Honor' la trayectoria laboral y humana de personalidades del municipio. Con este mismo grupo de compañeras impulsó en 2003 la Cofradía de Semana Santa 'Jesús Condenado a Muerte', participando como un nazareno más en las procesiones. Una devoción religiosa que también profesaba a la Patrona de Santoña, la Virgen del Puerto.

En 2011, María Fernanda emprendió su andadura política. Primero en las filas de UPyD, ocupando cuatro años la bancada de la oposición. Y en 2015, tras haber creado el partido Activa Santoña, pasó a integrar el equipo de Gobierno con PSOE y PRC. Linares estuvo al frente de la concejalías de Hostelería, Comercio, Sanidad y Radio hasta su dimisión. Impulsó iniciativas como la feria del pincho Juan de la Cosa, campañas para activar la compra en los establecimientos locales o el Pinchiquito. El alcalde en funciones, Sergio Abascal, tras su pérdida, la ha descrito como una «compañera leal y cercana, siempre dedicada a nuestras fiestas y al fomento del comercio y la hostelería local».

Al retirarse de la política, volvió a su puesto de empleada municipal, esta vez en el Registro, teniendo que retirarse por un problema de visión. A menudo, Nanda paseaba por El Pasaje con la compañía de sus amigas que la recordarán como «una persona maravillosa».