Un luchador que reivindicó para su pueblo con educación

De él, bien conoce su vida Roberto Ortiz González, secretario general de este colectivo vecinal. Según señala, Eladio era una persona muy afable «Para mí -dice- un hombre fantástico, que luchó muchísimo por Sierrapando».

Curiosamente, Eladio había nacido en Polanco, donde además descansan ya sus restos mortales. Pero en esta conocida zona de Torrelavega se estableció hace ya muchos años, para fundar una empresa de muebles de cocina que lleva su nombre.

Pero tan pronto se integró en la ciudad que podía presumir de ser uno de los socios más antiguos de la Gimnástica. De hecho, según cuenta Roberto, poseía un azulejo de porcelana de los que el club entrega a sus abonados más veteranos. Era también amante de la caza -tenía en Palencia algún coto con otros compañeros- y con el secretario general de la asociación de vecinos solía ir a pescar cangrejos. Además, le gustaba todo lo relacionado con la huerta y la plantación de árboles. En su finca, según Roberto, tiene entre 40 y 50 ejemplares.

Gutiérrez fue un hombre comprometido que durante veinte años trabajo sin descanso para favorecer el desarrollo de su lugar de residencia. Lo hizo siempre fuerte en sus reivindicaciones, en sus maneras de pedir mejoras y reformas. Por ello fue una persona querida y, sobre todo, respetada. Desde que tomara las riendas de la Asociación de Vecinos de Sierrapando estuvo muy pendiente a los compromisos que con él adquirieron los distintos alcaldes con los que trató los asuntos del pueblo. Pero además, se esmeró en la organización de fiestas, magostas y cabalgatas.

El actual regidor de Torrelavega, además de resaltar su forma de reivindicar siempre cordial y con suma educación, ha señalado tras conocer su fallecimiento que «hemos perdido a una gran persona».