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Sofía Setién. DM
Una mujer solidaria que siempre ofreció comida y aliento al necesitado
Obituario | Sofía Setién Ruiz, vecina de Suesa

Una mujer solidaria que siempre ofreció comida y aliento al necesitado

Feliciano Vega

Miércoles, 17 de abril 2024, 02:00

El pasado 10 de abril, rodeada de los suyos, fallecía en Suesa (Ribamontán al Mar) Sofía Setién Ruiz a los noventa años. Su muerte ha causado gran dolor y pena a su familia y numerosas amistades por tratarse de una persona muy querida y respetada en Santander y, sobre todo, en el pueblo de Suesa, de donde era oriunda y residía. En los últimos tiempos la salud de Sofía se había quebrantado bastante lo que le impedía salir de su hogar, pues necesitaba de cuidados especiales.

Sofía, conocida familiarmente como 'Chucha', había nacido en el seno de una familia de ganaderos muy apreciada y respetada en Ribamontán al Mar. La mayor de cuatro hermanos, fue una persona creyente, bondadosa, generosa y solidaria, siempre dispuesta a ayudar a los más necesitados. Hace unos años, cuando residía en Santander y su salud se lo permitía, acudía periódicamente a los hospitales y residencias de mayores para visitar a los enfermos, acompañándoles, dándoles ánimos y facilitándoles la ayuda que demandaban.

Tanto en su casa de Santander como en la de Suesa, sus puertas siempre estuvieron abiertas para todo aquel que allí se presentaba pidiendo ayuda, ofreciéndoles con amor y respeto un plato de comida y el aliento necesario para seguir adelante.

Chucha había contraído matrimonio con Antonio Quintama Sota, fallecido en 2020, con quien tuvo tres hijos: Juan Antonio, fallecido en 2005; Pedro y Ana María. Sus hijos siempre permanecieron atentos a las necesidades de Chucha, en especial Pedro, sacristán de la iglesia de Santa Eulalia de Suesa con quien vivía. Junto con su hermana Ana María, ambos fueron un ejemplo de cuidado hacia su madre.

Desde estas líneas compartimos con su familia, en especial con Ana María y Pedro, el dolor por la pérdida con el consuelo de pensar que su alma, por sus propios méritos y por la misericordia de Dios, estará gozando del bien de la felicidad y de la justicia infinita, verdadera y eterna.

Descanse en paz.

El autor:

Feliciano Vega es amigo de la familia.

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