La pedreñera despide a uno de sus más fieles seguidores

Tras el parón de la Guerra Civil, a principios de la década de los cuarenta, siendo presidente de la entidad blanca Manolo San Martín, Pepín ya disfrutaba de los primeros provinciales ganados por su amada Pedreña.

Fue gran aficionado también a las partidas de flor que se organizaban en la tienda-bar Llata, en el crucero de Muriedas, cada Navidad. Además de la SDR Pedreña, sus grandes pasiones fueron el Real Madrid y el Racing, también los boxeadores y ciclistas de la región. En la tienda familiar entabló amistad y, más tarde formó parte, del grupo Muriedas de seguidores de la trainera de Marina de Cudeyo, con Andrés Fernández Arche, propietario de la Tejera Covadonga y patrocinador del club, además de Enrique Cimiano, Faustino Mantecón, Dionisio Sotero, Ángel Duque, Amaro y Nisio Gómez, todos ellos de Muriedas. Cuentan sus amigos que Pepín fue una 'enciclopedia parlante' del deporte en general y del remo en particular. En 1976, durante la celebración de la victoria de la trainera cántabra en la regata de La Concha, la SDR Pedreña concedió a Pepín la insignia de oro y brillantes de la entidad. Vivió en primera persona todas las vicisitudes por las que ha pasado la SDR Pedreña en el siglo XX y en lo que va del XXI. Nunca faltó a las asambleas generales del club. En todas las regatas del pasado siglo en las que remaba Pedreña, allí estaba Pepín Llata ataviado con su camisa y boina blancas.

Además de aficionado, siempre fue fiel colaborador de las diferentes directivas, en especial de la presidida por Toñín Corino. Más que un forofo de Pedreña fue un caballero del remo, pues se granjeo grandes amistades entre las gentes del remo de todo el Cantábrico, especialmente en Orio, de donde logró traer a entrenar y a remar a Pedreña al famoso entrenador vasco Michelena.

Se ha muerto, sin duda, el más grande seguidor del remo de Pedreña, de entre los no nacidos en Marina de Cudeyo. Descanse en paz Pepín Llata.