La futura ley antifracking saca a relucir de nuevo las discrepancias en el bipartito

En un nuevo capítulo de las discrepancias que mantienen PSOE y PRC casi desde el primer minuto de legislatura, la vicepresidenta señaló ayer que esa norma no figura en el programa legislativo para este año, que se aprobó el 13 de enero, ni tampoco se ha tratado en el Consejo de Gobierno. "Ya tuvimos en una mala experiencia en el Constitucional y no sería deseable volver a incurrir en competencias del Estado", señaló. Si la propuesta del PRC en el Parlamento para instar al Gobierno a elaborar la ley sale adelante, entonces sí que la socialista reconoce que se pondrían "a trabajar". Evidentemente, la iniciativa regionalista se ha presentado impulsada por el propio Gobierno regional.

Mientras tanto, Podemos aseguró ayer que apoyaría "sin dudas" esa ley antifracking, por lo que ha mostrado su "satisfacción" por la propuesta planteada por los regionalistas. "Cerraría las puertas de otras reformas legislativas" que, a juicio del partido, "puede tener consecuencias indirectas para abrir la puerta al fracking", en referencia a la modificación prevista de la Ley del Suelo actual.

"Hemos criticado legislar a la carta tal y como pretende hacer el Gobierno sin que nadie haya visto el proyecto y sí solicitamos que primero se apruebe la ley antifracking para después debatir esa reforma de la Ley del Suelo", señalaron desde Podemos.