Enredar

Salir como un señor y vivir como un político clave en la historia de Cantabria era el mensaje. Pero los sin trabajo lo enmerdaron tanto que la ventaja inicial se volvió en su contra. Que el PP de Cantabria está fracturado es un hecho, que Buruaga tiene que mostrar músculo es una necesidad, y que el partido no será lo mismo es una evidencia constatada estos días por los intentos secesionistas de un grupo de descontentos dirigidos por un ghost black. Esta desazón quedará reflejada en alguna lista con diferentes siglas en algún pueblo de Cantabria. Al PP le quedan dos años para buscar caras y adeptos a la nueva causa; es complicado, pero no imposible. ¿Y fuera del partido, qué piensan? Por un lado, encantados por esta división. Pero, por otro, ese aire fresco de poder hablar y escuchar puede ganar muchos enteros. Así lo aseguran desde el PRC, Ciudadanos y, de refilón, PSOE que serán los más perjudicados con este nuevo formato Popular.

Madrid ahora lo tiene claro a pesar de que algunos continúan enredando haciendo su trabajo de hombre negro para sus jefes ya sin el control del partido. Hace menos de una semana los titulares eran respeto, unidad, disciplina, ahora unos cuantos quedan retratados y falta lo peor, el ventilador. Cuidado, el vertedero no está sellado. @claudioacebo.com