Secciones
Servicios
Destacamos
Lola Gallardo
Miércoles, 31 de mayo 2017, 08:49
¿Nos podemos fiar de la historia? No. La respuesta de la doctora en Filología Hispánica Mar Langa Pizarro es tajante. "Ni de la historia ni de casi nada", matiza y ejemplifica su mensaje con una pregunta : "¿Cuántas mujeres hay en los libros de historia, ... literatura...? ¿qué pasa, que las mujeres no existen, no viven, no están? Si yo fuera un extraterrestre y me fiara de los libros de historia, llegaría a la conclusión de que en este planeta el 99% de la población es masculina y no es la realidad". Mar Langa presentó este martes en el Ateneo de Santander su tesis doctoral sobre la novela histórica donde llega a la conclusión de que la historia ha sido manipulada.
Doctora en Filología Hispánica, Langa es profesora en la Escuela Europea de Alicante e investigadora en el Departamento de Filología Española de la Universidad de Alicante. La curiosidad por la historia surgió de su interés por conocer hasta que punto la historiografía oficial ha sido manipulada y cómo a partir de los años ochenta un grupo de escritores en todo el mundo se dedicaron a hacer novelas que muchas veces, desde la ficción, "relatan una verdad más cercana a la verdad que la de los propios libros de historia". Langa considera que la historia se ha manipulado, en ocasiones, sin querer, por el uso del lenguaje "no es lo mismo hablar de una banda armada que de un ejército de liberación de un pueblo", matizó y en otras con conocimiento porque "no hay que olvidar que la historia casi siempre está escrita por los vencedores". La principal consecuencia de cambiar la historia ha sido "crear mitos que no lo son o trasladar a la sociedad hechos falsos. No es lo mismo pensar en un dictador solo desde el punto de vista político que verlo como un violador de menores", puntualizó. Por eso, insistió, en que hay aspectos de los políticos, héroes o gobernantes que les pueden hacer muy diferentes a lo que la historia ha contado de ellos.
Una de sus principales preocupaciones gira en torno a la desaparición de las mujeres en los libros de historia. "Las mujeres han jugado un papel bastante más importante del que nos creemos", explica. Y basa su afirmación en una de sus últimas publicaciones, más histórica que literaria, sobre el papel que jugaron las españolas en la conquista de América. "Nos han contado que no fueron y resulta que en el segundo y tercer viaje de Cristóbal Colón había mujeres", y aclara que la mayoría viajaron con el nombre del padre o del marido o como polizonas. Alrededor de una tercera parte de los pasajeros eran mujeres y "es algo que no se sabe". El por qué se encuentra en que "la historia la han acuñado los varones. Por eso lo que nos han contado no es lo que realmente sucedió".
"Una persona con menos destreza literaria escribirá una especie de panfleto"
Mar Langa define la novela histórica como aquella que trata de reproducir de modo verosímil una determinada época del pasado preferentemente no vivida por el autor. Para ello, conjuga lo real y lo inventado, las técnicas historiográficas y las novelescas". En este punto, señala que unos escritores dan más importancia a la parte histórica y otros a la ficción. La mayoría adoptan un personaje real, estudian durante años su historia y después lo trasladan a un mundo que mezcla ficción y realidad. "Luego depende de la pericia del escritor y en el caso de un García Márquez o Vargas Llosa, por mucha investigación que tenga detrás la obra hay mucha literatura y muy bien hecha". Sin embargo, "una persona con menos destreza literaria escribirá una especie de panfleto". La literatura le ha enseñado a Mar Langa "a vivir vidas que no viviría nunca, algunas porque no quiero vivirlas. Yo creo que la literatura nos da esa oportunidad y nos da palabras para lo que no sabemos explicar y nos hace vivir experiencias que nunca viviremos quizás porque no nos atrevemos".
Finalmente, se refirió a su trabajo sobre Del franquismo a la posmodernidad: la novela española (1975-1999) y reconoció que con la Transición Española surgieron subgéneros. "En la Transición comienza un movimiento, como es lógico, después de que Franco dijera que solamente le juzgará Dios y la Historia y se ocultaran muchos datos. Y la literatura ha sido la encargada de rescatar todo lo que se ha estado ocultando", explicó. Crítica literaria, Mar Langa reconoce que el mundo editorial se mueve por modas y "hoy asistimos a una cultura de la prisa y estamos conectados con el ordenador y con el móvil de forma permanente y leer una novela no es sencillo, exige sentarte, silencio y desconectarte de los demás". Hoy tiene abierto en su ordenador un artículo sobre Augusto Roa Bastos, Premio Cervantes, porque está escribiendo una pequeña reflexión sobre su obra. Más adelante, volverá a investigar sobre las mujeres en la historia.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.