Secciones
Servicios
Destacamos
Decía mi madre que, cuando te tengas que ir de un lugar, procures hacerlo sin hacer ruido, sin dar muestras de enfado, sin dar portazos, sonriendo, agradecido por lo aprendido y pidiendo perdón por todo aquello que no hiciste bien». Me pide un amigo íntimo ... que le ayude en este menester y, la verdad, no sé qué decirle. Le digo que su paso entre nosotros no ha dejado a nadie indiferente, que, siendo positivos, ha de alegrarse, porque algunas personas sentirán alivio y alegría al ver que se marcha, y para otras siempre habitará en su corazón. Que diga que creyó que se podía ir más lejos, ser mejor, volar más alto. Que afirme que, aunque no tenía ningún título real, sí hizo real muchos de sus sueños. Porque, en definitiva, los hombres pasan, pero sus obras permanecen.
Continuaría con mi labor de asesor en su despedida diciéndole que, muchos años después, el colegio que él conoció es muy diferente al que encontró, y que eso ha sido posible en parte, no por lo que tú has pedido que hagan por ti, sino por lo que tú has decidido hacer por los otros. En definitiva, la vida es 10% lo que te pasa y 90% tu reacción a las cosas que suceden. Somos el producto de nuestras decisiones y, ciertamente, paraste pocas veces quieto. Decía Mark Twain que los dos días más importantes en tu vida son el día en que naces, y el día que descubres para qué naciste, y tú hace mucho que sabías cuál era tu misión.
«Decía mi madre, que cuando te tengas que ir, procures hacerlo sin hacer ruido, sonriendo».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.