Compartir, nuestra riqueza

Es imperativo que la prosperidad llegue a todas las personas, sin dejar a nadie al margen. Por eso, en 2025 Manos Unidas propone «compartir la prosperidad para erradicar la pobreza, el hambre y la desigualdad». Para ello es necesario poner la economía al servicio de las personas. Y si hay un lugar donde esta economía es más necesaria es sin duda en el Sur global, donde Manos Unidas acompaña a las comunidades y apoya los proyectos vitales de las personas más vulnerables del planeta. Manos Unidas trabaja para que cada persona y cada comunidad tenga una vida próspera. Desea «una prosperidad desde abajo» para que ningún ser humano sea excluido del «banquete de la vida al que todos los hombres son igualmente invitados por Dios».

Posiblemente no es tarde para construir una utopía que nos permita compartir la tierra. Compartir es convivir con el otro, para del yo, hacer un nosotros. Si compartes tu pan, te gustará más. «Tirarle el hueso al perro no es caridad. Caridad es compartir el hueso con el perro cuando se está tan hambriento como él». (Jack London).