Un libro en blanco

Y mientras frenamos mente y corazón, ignoramos el potencial, la experiencia (qué es un grado), y olvidamos el niño que fuimos, ese que se asombraba ante todo. El que se alegraba con lo pequeño y deseaba crecer constantemente, por fuera y por dentro. El que decía lo que sentía, reía por muchas cosas o por la mayoría, le encantaba pisar los charcos, y mojarse bajo la lluvia, (aunque luego la bronca le calase los entresijos del alma). Además, no tenía enemigos, no veía peligros y solo quería disfrutar.

Doce meses, no voy a decir doce causas, (la propaganda es inmisericorde conmigo y con todos). Pero sí, mucho tiempo, muchísimo tiempo para soñar despierto, para pasear un poco más, ir despacio, muy despacio, contemplar el paisaje mientras viajamos por la vida, tomar café con los amigos y decir 'te quiero' a quienes añoramos, queremos y amamos. Un nuevo año, una oportunidad y todo un regalo. Serrat cantaría 'Este puede ser un gran año, plantéatelo así'.